Los parques infantiles son una importante fuente de infección por parásitos, sobre todo la zona de los areneros. Esto aumenta el riesgo de padecer enfermedades, sobre todo, de tipo gastrointestinal. Sin embargo, existen una serie de acciones que es posible emprender para evitar ser víctima de una afección.
Parásitos en parques infantiles y los riesgos a la salud
Los parques públicos se encuentran repletos de parásitos que afectan principalmente a los niños debido a que perros y gatos comparten las áreas con los visitantes. Según un artículo publicado por el sitio The Conversation los animales pueden expulsar parásitos intestinales a través de las heces, contaminando el suelo y los espacios compartidos.
De hecho, según varios estudios actuales, una quinta parte de los lugares públicos del mundo están contaminados con huevos de Toxocara canis y Toxocara cati, un género de nematodos, que tienen como huéspedes respectivamente a perros y gatos, callejeros o domésticos.
Ambos excretan los huevos del parásito por las heces y son los principales agentes causales de la toxocariasis humana, la cual se contrae por ingerir huevos viables del suelo contaminado con heces de perros, por malas prácticas de higiene o por ingerir alimentos contaminados.
Según el artículo, tras ingerir un huevo embrionado preparado para eclosionar, la larva pasa al torrente sanguíneo. Lugo, excava a través de los tejidos del cuerpo, donde los gusanos pueden acumularse en el ojo, el cerebro, el hígado y la piel.
Esto puede tener como consecuencia daños tisulares severos, ceguera e infecciones encubiertas que pueden disminuir la cognición neurológica o provocar retrasos en el desarrollo.
Entre los síntomas más comunes de la toxocariasis están:
- Fiebre
- Tos
- Dolores
- Musculares
- Pérdida de apetito
- Hepatoesplenomegalia (crecimiento del hígado y bazo)
- Neumonitis
- Asma
- Alteraciones visuales
- Meningitis
- Vasculitis cerebral
- Encefalitis
- Trastornos neurodegenerativos (convulsiones, demencia y déficits cognitivos)
¿Qué hacer para evitar este tipo de riesgos en los parques públicos?
Una forma de evitar que los parques infantiles sean una fuente de riesgo de infecciones parasitarias es recoger y retirar los excrementos de perros y gatos de forma inmediata.
Así como desparasitar con frecuencia a las mascotas, establecer prácticas higiénicas correctas, evitar el contacto con tierra o arena, mantener los areneros domésticos cubiertos cuando no estén en uso y enterrar o embolsar las heces de los animales antes de desecharlas en la basura.
Además de lavar correctamente las manos después de manipular mascotas, suelo o arena y antes de ingerir alimentos, así como de reforzar el mensaje educativo a la sociedad en general y enseñar a los niños que es peligroso comer arena o tierra.