Los gamers de todo el mundo pueden estar en riesgo de sufrir pérdida auditiva irreversible y/o tinnitus, según una revisión publicada en la revista de acceso abierto BMJ Public Health y retomada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
¿Por qué los gamers están en riesgo de pérdida auditiva?
La evidencia sugiere que los niveles de sonido informados en estudios de más de 50 mil personas a menudo se aproximan o superan los límites de seguridad permisibles al momento de jugar videojuegos, concluyen los investigadores.
- Por esta razón, tanto BMJ como la OMS urgen la necesidad de mayores esfuerzos de salud pública para crear conciencia sobre los riesgos potenciales.
Los investigadores precisan que, además del volumen alto a través de audífonos, los videojuegos representan un factor importante al momento de hablar sobre la pérdida auditiva.
Esto debido a que los gamers suelen jugar con niveles de sonido de alta intensidad y durante varias horas seguidas, añaden.
En este mismo sentido, diversos estudios alertan que 10 millones de personas están en riesgo de perder la audición en Estados Unidos por la exposición a videojuegos demasiado altos, sobre todo por aquellos de disparos y carreras.
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¿Cuál es el volumen recomendado para escuchar tus videojuegos?
Los audífonos pueden causar daños al oído interno sólo cuando se usan a un alto volumen por largo tiempo, según dijo el Dr. Gonzalo Corvera, director del Instituto Mexicano de Otología y Neurotología (IMON) en entrevista con Unotv.com.
Por esta razón, precisó que el volumen de los audífonos es demasiado alto cuando rebasa los 80 decibeles (dB), o cuando la persona no percibe si alguien le habla.
Además, señaló que los auriculares no se deben usar por muchas horas continuas y recomendó dar un descanso a los oídos durante 15 minutos por cada hora de uso.
Lo preocupante, según BMJ y la OMS, es que los niveles de sonido informados en gamers llegaron hasta los 89 dB en centros de juegos.
En cuanto a la duración de la exposición al ruido por parte de gamers, esta varió según el modo y la frecuencia de acceso: desde diariamente hasta una vez al mes, en un promedio de 3 horas semanales.
El problema está en rebasar los niveles permitidos de sonido
Pese a lo dicho por el Dr. Corvera, los límites de exposición permitidos referidos por BMJ son de alrededor de 100 dB para niños y de 130 a 140 dB para adultos. Dichos límites, generalmente, suelen ser rebasados.
La recomendación, retomada por la OMS, es que los gamers adultos no rebasen un nivel de exposición al ruido permitido de 80 dB durante 40 horas a la semana. En el caso de niños, el límite es de 75 dB durante 40 horas a la semana.
Los gamers jóvenes son los más expuestos a perder la audición
Seis estudios referidos por la OMS y BMJ alertan por la prevalencia de los videojuegos entre los jóvenes, que oscilaba entre el 20% y el 68%, aumentando el riesgo de padecimientos como pérdida de audición y tinnitus.
“Dos estudios encontraron que el uso de centros de juegos por parte de los alumnos de la escuela estaba relacionado con mayores probabilidades de sufrir tinnitus severo y pérdida de audición de sonidos de alta frecuencia en ambos oídos”.
BMJ / OMS
Por otro lado, tres estudios indicaron que los niños jugaban videojuegos con más frecuencia que las niñas, durante períodos de tiempo más largos y con niveles de intensidad de sonido más altos.
“Una estimación indica que en 2022 habría más de 3 mil millones de jugadores en todo el mundo”, dice el artículo de BMJ, retomado por la OMS.
¿Qué son el tinnitus y la pérdida auditiva?
El tinnitus es un sonido de timbre u otros ruidos en uno o en ambos oídos. “El sonido que sientes cuando tienes tinnitus no es externo y otras personas no lo escuchan”, dice la Clínica Mayo.
Los expertos insisten en que esta enfermedad es causada generalmente por una afección subyacente, como la pérdida auditiva relacionada con la edad, una lesión del oído o un trastorno del aparato circulatorio.
La pérdida auditiva puede ocurrir cuando alguna de las partes del oído no funciona de manera normal. Esto incluye el oído externo, el oído medio, el oído interno, el nervio auditivo y el sistema auditivo, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).