El mal humor social es ya considerado un trastorno emocional, según advierte la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). El profesor David Reyes Domínguez, perteneciente a la Facultad de Psicología, señaló que los problemas económicos, el desempleo, los conflictos familiares y los desencuentros políticos están exacerbando la insatisfacción, el malestar y el enojo de las personas.
David Reyes Domínguez aseguró que el mal humor social se manifiesta a través de un comportamiento irritable y agresivo, no solo en espacios públicos, sino también en el ámbito familiar y en la convivencia con amigos. Además, destaca que existe una relación directa entre el mal humor social y el estado de ánimo que prevalece en el entorno colectivo de las personas.
El trastorno emocional asociado al mal humor social se caracteriza por síntomas como:
- Enojo
- Irritabilidad
- Hipersensibilidad a los estímulos
- Tristeza
- Depresión en algunos casos
El académico de la UNAM señala que cuando una persona se somete a un ambiente social negativo, puede presentar síntomas de bipolaridad, pasar de un estado depresivo a uno de agresión, sin comprender por qué le sucede. Muchas veces, las personas no comprenden este malestar emocional y no lo tratan adecuadamente, optando por ignorarlo.
Si no se comprende ni se trata adecuadamente este malestar emocional, puede llevar a un deterioro progresivo del comportamiento y los patrones de pensamiento, explicó Reyes Domínguez.
El especialista destaca que una alerta clara de que el mal humor ha superado los límites de la tolerancia es cuando se manifiesta agresividad al conducir, como respuesta inmediata a situaciones como que otro automóvil se cruce indebidamente, lo que desencadena el uso del claxon, insultos e incluso agresiones físicas.
Si cualquier evento intrascendente provoca molestia y desencadena una respuesta automática violenta o agresiva, es necesario buscar ayuda profesional y reconocer que se está cayendo en una situación anormal.
Reyes Domínguez señala que uno de los factores desencadenantes del mal humor social es el aumento de precios de productos y servicios básicos, lo cual afecta negativamente el entorno cotidiano de las personas.
El incremento en los precios de la gasolina, por ejemplo, genera rechazo, comentarios negativos, incomodidad y, en última instancia, un estado de ánimo negativo. La gente se siente incómoda debido a los mayores gastos en gasolina, el aumento de precios en la canasta básica y la pérdida de poder adquisitivo.
Otro indicador significativo es la pérdida de autocontrol, que conduce a bajos niveles de tolerancia. El especialista enfatiza que las nuevas generaciones no están siendo educadas para tener autocontrol, lo cual es un rasgo de personalidad crucial para determinar si una conducta es positiva o negativa.
La corrupción, la inseguridad, la violencia familiar y política son otros fenómenos sociales que contribuyen a la intolerancia y la frustración en la sociedad. Estos problemas continúan afectando a la sociedad y generan pensamientos negativos debido a la falta de resultados y soluciones efectivas.
