Desde el inicio del brote del COVID-19, la comunidad científica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se ha concentrado en buscar alternativas para resolver este problema de salud pública, por lo que trabajan en conjunto con Canadá para desarrollar farmacéuticos.
Para encarar la pandemia, un equipo de investigadores de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán, de la UNAM, Estado de México encabezados por el doctor Enrique Ángeles Anguiano, responsable del Laboratorio de Química Medicinal, proponen tres claves de acción.
- El reposicionamiento de fármacos
- La prueba de compuestos ‘in house’
- El desarrollo de un compuesto híbrido de doble acción
¿La vacuna ya no es suficiente para tratar el COVID-19?
Este accionar bloquea los receptores que se encuentran en las células humanas y ocasionan el contagio. Además, en caso de que el virus ingrese al organismo, impide la replicación de la carga viral. Con el surgimiento de nuevas variantes del SARS-CoV-2, las vacunas pueden perder eficacia, lo que insta a la necesidad de fármacos.
A partir de este estudio, el grupo de trabajo ha realizado diversas vinculaciones, una de ellas con apoyo de la Secretaría de Relaciones Exteriores, gracias ella pudo trabajar con el doctor Levon Abrahamyan, responsable del Laboratorio de Virología, de la Universidad de Montreal, Canadá.
Los beneficios de farmacéuticos contra COVID-19
Uno de los beneficios será la capacitación que en próximas fechas recibirán alumnos e investigadores de la FES Cuautitlán, quienes viajarán para aprender sobre el manejo de la actividad biológica dentro de los Laboratorios de Bioseguridad Nivel 3 (BL3). Este conocimiento será transmitido a estudiantes y docentes de la primera multidisciplinaria.
“Para nosotros la contribución con Canadá fue vital, ya que ellos cuentan con un BL3, algo que no tenemos en la Facultad. Ahí pueden tratarse agentes nativos o exóticos letales con un alto potencial de transmisión. Por esta razón, ahí se pudo evaluar la efectividad de nuestros compuestos candidatos contra el virus”
Enrique Ángeles Anguiano
Se comprobó que la interacción entre spike y la ECA se ve afectada y disminuye ante la presencia del compuesto creado por los universitarios (polifenol LQM322). Otros de sus compuestos LQM también presentan un grado de efectividad; sin embargo, la evidencia computacional no permite afirmar si es significativa.
¿Cómo son los resultados provisionales?
Actualmente, los investigadores también cuentan con resultados positivos sobre otros compuestos que desarrollaron en la Facultad, los de la familia LQM300, que proponen como agentes antivirales. Estos serán revelados próximamente en una publicación científica.
El diseño y síntesis de estos compuestos es un logro trascendental para la UNAM y para el país, puesto que han demostrado mayor efectividad y menos efectos adversos en comparación con los que ya existen en el mercado, que son más tóxicos y pueden causar mareos y afectar los riñones y el hígado.