El consumo de bebidas azucaradas, tales como refrescos o jugos, está relacionado con el desarrollo de cáncer de hígado. Más aun, un estudio reciente descubrió que el simple hecho de beber uno de estos productos al día aumenta el riesgo de padecer esta enfermedad.
¡Tomar una bebida azucarada al día aumenta el riesgo de cáncer de hígado!
Consumir una o más bebidas azucaradas por día se asoció con una incidencia significativamente mayor de cáncer de hígado y muerte por enfermedades hepáticas crónicas, según un estudio publicado en la revista académica, JAMA Network.
- Los investigadores encontraron que las personas que beben tres o menos de estos productos al mes tienen menos riesgo de desarrollar cáncer hepático.
El estudio se desarrolló en 98 mil 786 mujeres posmenopáusicas durante aproximadamente 20.9 años. “Las mujeres que consumían una o más porciones por día tenían tasas significativamente más altas de cáncer de hígado y y mortalidad por enfermedad hepática crónica“, señalaron los investigadores.
Al menos 207 de las mujeres posmenopáusicas que consumían una o más bebidas azucaradas al día desarrollaron cáncer de hígado y 148 murieron por enfermedad hepática crónica.
Expertos alertan por el consumo excesivo de estos productos
El estudio liderado por el investigador Longgang Zhao señaló que la importancia de estos números es alertar a la población por el consumo de bebidas azucaradas. Según la investigación, aproximadamente el 65% de los adultos en Estados Unidos las consumen a diario.
Esto también compete a México, el primer consumidor de refrescos en el mundo con un promedio de 163 litros por persona al año. Es decir, 40% más que EU, que, a su vez, ocupa el segundo lugar con 118 litros, según la UNAM.
El estudio sobre bebidas azucaradas y cáncer de hígado no es definitivo
Los autores señalan que el estudio fue observacional, y no se puede inferir la causalidad, y se basó en respuestas autoinformadas sobre la ingesta, el contenido de azúcar y los resultados.
Se necesitan más estudios para validar esta asociación de riesgo y determinar por qué las bebidas azucaradas parecen aumentar el riesgo de cáncer de hígado. Además, se necesita más investigación para dilucidar los posibles mecanismos mediante la integración de estudios genéticos, preclínicos y experimentales.
“Los estudios futuros deberían confirmar estos hallazgos e identificar las vías biológicas de estas asociaciones”, precisan las conclusiones del estudio.