Antojitos mexicanos en un mercado al poniente de la Ciudad de México, comensales como Isaías, sólo buscan comida rica, de buena sazón, sin importar cuánta sal tenga.
- “Yo en lo personal no me fijo en eso, me fijo más como en el sabor que tiene la comida, qué tan rica está”. Isaías Sánchez, comensal
En la cocina saben cuánta sal se le echa a cada guiso.
- “Los que traen más sal es pollo, carne, chicharrón, picadillo”. Daniel, vendedor
Comer, sin fijarse, cuánta sal tienen los alimentos puede derivar en un problema de salud, por ejemplo, tres tacos de barbacoa contienen 6 gramos de sal y si sumamos el consomé, con 3 gramos y medio, ya se rebasan los cinco gramos al día recomendados al día por la Organización Mundial de la Salud.
Bombas de sal para el cuerpo que también incluyen alimentos enlatados, empaquetados y la comida rápida.
- “La hamburguesa, todo lo que es comida rápida como la pizza, los embutidos como el tocino, jamón, los nuggets de pollo empanizado”. Danae García, nutrióloga
Ahí no termina, hasta los productos light son altos en sodio.
- “El refresco light es rico en sal, entonces, no se toma el azúcar pero se toma la sal y entonces le sube la presión”. Jorge Víctor Yamamoto, médico Endocrinólogo
Sí, la presión alta es la primera consecuencia de estas bombas de sal, pero hay más.
- “Daño renal un exceso de sodio provoca daño renal, daño hepático, daño al corazón”. Danae García, nutrióloga
Seis de cada 10 personas con diabetes, tuvieron hipertensión previamente.
“Hipertensión es la puerta de entrada a otras enfermedades cardíacas tanto de la hipertensión y falla cardiaca como de la diabetes mellitus”. Jorge Víctor Yamamoto, médico endocrinólogo
Recomiendan reducir el consumo de estas bombas de sal e incrementar la ingesta de agua simple.