El arte marcial chino ha venido ganando terreno a nivel deportivo en América Latina durante los últimos años, lo que ha permitido ampliar “enormemente” su difusión en Occidente, aseguró este martes en Lima, el instructor mexicano Francisco González.
El Kung Fu se usó como arte marcial para “defensa propia” antes de la década de 1970, pero posteriormente se adoptó “como deporte marcial, con reglas y con aspectos competitivos”, explicó a Xinhua González, quien es presidente de la Fundación Cultural China de Kung Fu de México.
El Kung Fu en Occidente
Conzález sostuvo que en Occidente se ha tenido una idea diferente a como se considera en China, donde “siempre ha tenido una idea de lealtad, benevolencia, aunado al aspecto marcial, al aspecto de la defensa personal”. Aunque sigue trascendiendo su relevancia por sus diferentes aportes.
“Entonces, en Occidente sí ha tenido una gran importancia, gran relevancia en este sentido de traer y continuar con las virtudes del pasado, de benevolencia, de fe, sobre todo; y del gran respeto, como una disciplina de respeto hacia la gente adulta, hacia los mayores”, acotó.
El instructor expresó lo anterior en el marco de las actividades programadas por el 15° aniversario del Instituto Confucio de la Universidad Católica del Perú (PUCP), a donde acudió para impartir sus conocimientos sobre artes marciales y medicina tradicional china.
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Unión de cuerpo y mente
El experto consideró que la práctica, conocida también como wushu o gongfu, ha tenido un sentido “terapéutico” para las personas, ya que “el hacer ejercicio siempre nos va a alejar de muchos aspectos de enfermedad, de padecimientos, incluso de algunas adicciones”.
Se le consultó sobre los lineamientos que deben seguir quienes practican este deporte, afirmó que es el “desarrollo de la conciencia” y los “movimientos de manera consciente” los que ayudarán a llevar “una elevación emocional”, pues al final lo relevante es que “la conciencia va a mover al cuerpo”.
Tras indicar que debe haber “una unión perfecta entre el cuerpo y la mente”, apuntó que para el aspecto tradicional del arte marcial hay tres condiciones, que son el control del cuerpo, control de la respiración y el control de los pensamientos.
“Entonces, paulatinamente el control del cuerpo, el control de la respiración y el control de los pensamientos, nos lleva a un mejor control de toda nuestra vida. Esa es la aportación que ha dado las artes marciales y ahora el deporte de wushu en Occidente”, subrayó.