Detrás del equipo de protección está el rostro de un taxista que se sumó a la lucha contra la pandemia. Con la propagación del COVID-19 en la Ciudad de México, vio mermados sus ingresos.
“Desde que empezó el tema de la sana distancia y de que todo mundo tiene que estar en casa bajó más de un 70, 80 por ciento el pasaje”.
Ex taxista
Durante el traslado a su nuevo trabajo nos cuenta que encontró un espacio en el área de limpieza de la primera línea de combate al coronavirus.
“Estamos en el primer plano de batalla, aquí somos los principales tanto personal de limpieza como enfermería, como los doctores y vamos agarrados de la mano porque si nosotros no les mantenemos limpio, tanto al personal médico como a los pacientes, va a ser un foco de mayor infección”.
Ex taxista
Además ha comprendido la importancia de lavarse las manos y guardar sana distancia.
“Nos capacitaron para eso, debemos de tener todas las medidas de sanidad posibles, al momento que yo termino mis labores inmediatamente es quitarnos el uniforme de trabajo, lavarnos las manos si vamos a seguir laborando, ya cuando vamos a terminar el turno es ir a bañarse”.
Ex taxista
Sabe del riesgo pero lo impulsa la satisfacción de tender la mano.
“Al momento que salen se sienten tan agradecidos o al momento que estás pasando y les haces su limpieza, te agradecen de más porque obviamente entienden lo que uno está viviendo, todo el sacrificio que hacemos y el riesgo que corremos”.
Ex taxista
Y agradece la oportunidad de poder servir.
“Es bonito el trabajo, me gusta estar dentro del instituto y ayudar a la gente porque nosotros somos el único contacto que tienen en el exterior mientras están ahí adentro”.
Ex taxista