El director del Metro de la Ciudad de México, Guillermo Calderón, reconoció que las escaleras eléctricas de este transporte colectivo afrontan un problema grave: la orina que, por increíble que parezca, ocasiona daños a las mismas.
“Lo voy a decir con todas sus palabras: uno de los principales motivos de daño y descompostura de las escaleras (eléctricas) es el orinar”.
Dijo a Uno TV.
Agregó que esto sucede en varias estaciones de la red del Sistema de Transporte Colectivo Metro (STC Metro); sobre todo, en las noches, cuando baja la afluencia de usuarios.
Guillermo Calderón aseguró que la orina daña severamente los mecanismos de tracción de las escaleras eléctricas, lo que termina por sacarlas de funcionamiento, afectando a millones de usuarios que las necesitan.
“La orina es ácido úrico que produce una corrosión severa sobre los mecanismos, obliga a pasar de los mantenimientos preventivos, que cotidianamente se dan a las escaleras, a un mantenimiento correctivo, sustitución de partes y, con ello, engranes”.
Mencionó.
El director del Metro pidió a los usuarios tomar conciencia y abstenerse de hacer este tipo de prácticas, que atentan contra la calidad del servicio.
En otro tema, destacó el avance de la modernización de las escaleras eléctricas del Metro. En lo que va del año, han sido reemplazadas 27, siendo la última la ubicada en la estación Copilco, de la Línea 3.
“La escalera tienen altura de 8.9 metros y su costo asciende a 5.8 millones de pesos. Se suman estos equipos nuevos a los que ya tenemos. El avance operativo es de 7.5 billones de personas usuarias beneficiadas al mes con estas 27 escaleras que, ya están hoy funcionando”.
Dijo.