Llegar a ella es como si de un club secreto se tratara… Un pequeño letrero, escrito a mano, indica “tocar el timbre marcado con el número uno, una sola vez”. En breve el zaguán negro se abre para poder acceder a “Niña oscura”.
“Es más bien un símbolo; esta puerta está puesta para que tú pases, pero tú tienes que empujar”.
Max Ramos, director de la Librería “Niña oscura”.
Te recomendamos: El cine debe ser también un foro de denuncia: El discurso de Zelenski en Cannes
Una casona de finales del siglo XIX resiste el paso del tiempo para resguardar más de 90 mil libros de los llamados “de viejo”.
“La tenemos separada más o menos por tres cuartos: En el primero hay novela, literatura, también tenemos libro antiguo, primeras ediciones, algunos vienen firmados por los autores, con dedicatorias. Tenemos otra sección que es donde encuentran derecho, ciencia política, economía y tenemos un pequeño cuarto de historia”.
Andrés Serrano, colaborador de la librería “Niña oscura”.
En otra habitación hay, también, revistas y periódicos: “Nos gusta conservar las revistas son, digamos, como un vivo reflejo de su tiempo”, señala Max Ramos.
Los visitantes pueden ir y venir por “Niña oscura” y tomarse el tiempo para recorrer las páginas que ahí descansan.
“Se sienten con la libertad de ver el material que quieran y si llegan a tener duda nos consultan”.
Alejandra Sánchez, colaboradora de la librería “Niña oscura”.
Gerardo Vázquez visita por primera vez el lugar. Busca “tesoros” literarios.
También puedes leer: “Era una chava de barrio y ojos claros”: La historia de “Muñequita sintética”, de El Haragán y Cía.
“Hay ediciones, por ejemplo, que ya no son impresas, entonces, pues en estos lugares las vienes a encontrar”.
Gerardo Vázquez, estudiante.
También hay máquinas de escribir y de coser, películas y pinturas que están a la venta.
“Puede ser que encuentres otra cosa, puedes encontrar una pintura, una máquina de escribir o simplemente puedes sentirte en un lugar distinto”.
María Santiesteban, estudiante.
La librería “Niña oscura” lleva ese nombre en honor a la misteriosa niña de piel oscura que entregó las llaves del lugar un sábado del año 2006.
Quizá te interese: ¡El sueño de Anna Laura! De vender gomitas en Tamaulipas a misión de la NASA en Polonia
“Me entregó las llaves sin decirme absolutamente nada, salió a la calle y se perdió”.
Max Ramos
Los datos:
- “Niña Oscura” se encuentra ubicada en Díaz Mirón 142, Santa María la Ribera, alcaldía Cuauhtémoc, CDMX. Recuerda tocar el timbre una sola vez.
- El recinto literario se puede visitar de miércoles a sábado, de 10 de la mañana a 6 de la tarde.
