Investigadores en optometría del Instituto Politécnico Nacional (IPN) alertan sobre los riesgos de acudir a ópticas sin regulación, conocidas como “patito”, para realizar un examen de la vista.
De acuerdo con Mauricio Sánchez, jefe del departamento de Optometría de la Unidad Santo Tomás del IPN, es importante que las instalaciones donde se lleve a cabo el examen de la vista estén en buenas condiciones. Esto incluye desde la iluminación del consultorio hasta la comodidad del paciente durante el examen.
“Al hablar de que un examen visual es gratis, de inmediato podemos darnos cuenta de que, quizá, en ese consultorio o en ese lugar, no hay el equipo adecuado que se requiere para un examen visual de calidad”.
Mauricio Sánchez, jefe del departamento de Optometría, Unidad Santo Tomás.
Por su parte, Marcela Tapia, docente en la licenciatura de Optometría del IPN, subraya que el uso de lentes sin la graduación adecuada puede provocar síntomas como dolor de cabeza o mareos prolongados.
“Puede ser que esos lentes estén erróneos, no sean para mí o hubo un error; pero definitivamente el tiempo de adaptación, a lo mucho, es de dos a tres días”.
Marcela Tapia, docente de Licenciatura en Optometría.
Los especialistas destacan que la salud visual no se limita a ver con precisión, sino que también implica el cuidado del ojo como órgano. Subrayan que el proceso es complejo, pues involucra el sistema nervioso central, por lo tanto, es fundamental verificar que el lugar donde se realice el examen de la vista esté certificado por la Secretaría de Salud para garantizar la calidad y seguridad del servicio.
En conclusión, realizar un examen de la vista con optometristas no certificados, o “patito”, puede ser riesgoso para la salud visual y general, por lo que es importante buscar lugares regulados y con profesionales capacitados para cuidar de nuestra vista y bienestar.
