En la escuela para “dogtores”, a las 9:30 de la mañana inician con su entrenamiento, está prohibido jugar, deben esperar su turno y aprenden a desarrollar habilidades para ayudar a las personas.
“…Cuando los ven entrar con un perro y este perro trae un chaleco que dice que es un dogtor, es impresionante la reacción que tienen, entonces hacen las actividades de otra manera, sonríen mucho más…”
Margara Bravo | Fundadora Fundación Owen Care
Los entrenadores descubren las capacidades de cada uno, por ejemplo, la dogtora Perri hace olfateo deportivo. En un campo abierto, logró encontrar su premio.
Los dogtores Max y Mambo se preparan para asistir a una persona con discapacidad.
“… A los que tienen sillas de ruedas, a los que están paralizados de su cuerpo, ayuda a que les pase las llaves, les abra la puerta, que les prenda la luz, que les saque las cosas de la lavadora, del refrigerador…”
Ramón Salazar | Entrenador de Dogtores
Quienes tienen problemas emocionales, reciben la terapia de las dogtoras Frida, Yaqui y Victoria.
“…Cuando trabajamos con niños con cáncer, o con niños que tienen alguna discapacidad, estos perros que están entrenados, los ayudan justo a que detonen ciertas emociones que necesitamos trabajar…”
Margara Bravo | Fundadora Fundación Owen Care
Desde su adiestramiento, ya generan un impacto en sus entrenadores.
“… El estar trabajando con los perros (ya sea de asistencia o los dogtores,) es muy bonito; te cambia por completo, le da un giro enorme a tu vida porque ellos hacen como si estuvieras en otro mundo…”
Natalia Gamboa | Entrenadora de Dogtores
El equipo de la Fundación Owen Care terminó como el entrenamiento del día de hoy, y ellos están listos para volver a ser perros.
No podemos dejar de ver que son perros, ante todo son perros, entrenados, con un proceso, bien educados.
Margara Bravo | Fundadora Fundación Owen Care
