¿Cómo leemos y escribimos los ciegos? Juventino, indígena ayuujk con discapacidad visual, lo explica en su canal “Está chido ser incluyente”.
“Tengo una enfermedad en los ojos que se llama retinosis pigmentaria, esta genera dos tipos de condiciones: baja visión y al paso del tiempo genera ceguera”.
Juventino Jiménez | Asesor académico
Su familia migró a la Ciudad de México para que pudiera estudiar, ¿el reto? Encontrar las herramientas.
“Me toca empezar a enfrentarme a las barreras, que no hay materiales de lectura en formatos accesibles”.
Juventino Jiménez | Asesor académico
Sus primeros instrumentos: el punzón y la regleta del Sistema Braille.
“Yo lo utilizo para tomar notas, por ejemplo de números telefónicos que a lo mejor necesito tener a la mano”.
Juventino Jiménez | Asesor académico
Pero la tecnología es su mejor aliada; puede pasar un libro en formato .doc, en Word, a la memoria de una grabadora y leer un libro.
Lectores de pantalla y altoparlantes en celular y computadora le permiten manejar sus funciones, incluidas redes sociales.
Sin embargo, estas herramientas no siempre resultan accesibles para las personas con discapacidad visual. Por ejemplo, una regleta y un punzón tienen un costo aproximado de 250 pesos, mientras que un lector de libros cuesta alrededor de 15 mil pesos.
Hoy, Juventino es asesor académico de estudiantes con ceguera en la UACM, les acerca su propio aprendizaje.
“Nos dimos a la tarea de empezar a elaborar materiales en formatos accesibles, asesorar a los profesores, dar talleres de concientización al interior de la universidad”.
Juventino Jiménez | Asesor académico
