Rafael Caro Quintero fue liberado el 9 de agosto de 2013 en Guadalajara, Jalisco, y ahora es el hombre más buscado por la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con autoridades mexicanas, es uno de los fundadores del extinto Cártel de Guadalajara, organización criminal que hizo crecer junto con el narcotraficante Miguel Ángel Félix Gallardo.
Caro Quintero, también conocido como el “Narco de Narcos”, estuvo preso durante 28 años, acusado de asesinar al agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena Salazar, quien operaba encubierto en México. El agente fue asesinado junto con su piloto, el mexicano Alfredo Zavala Avelar, el 5 de marzo de 1985.
Casi un mes después, el 4 de abril de ese mismo año, fue capturado en Costa Rica por agentes de la DEA, quienes lo entregaron al Gobierno mexicano. También fue acusado de delitos contra la salud y asociación delictuosa.
La liberación de Caro Quintero tras 28 años preso
En agosto de 2013, el Primer Tribunal Colegiado de Jalisco otorgó un amparo a Rafael Caro Quintero. Los magistrados Rosalía Moreno, José Félix Dávalos y Lucio Lira consideraron que no debió ser juzgado por tribunales federales, ya que el agente de la DEA no era diplomático ni estaba asignado a algún cuerpo consular.
Cuando el capo tuvo el amparo en sus manos, el Segundo Tribunal Unitario en Materia Penal de Jalisco ordenó su inmediata libertad. Caro Quintero salió del Complejo Penitenciario de Puente Grande. Era la madrugada del 9 de agosto de 2013, cuando salió por su propio pie, abordó una camioneta y se fue. Así terminó el encierro.
Había sido sentenciado a 40 años de prisión, pero pese al descontento del Gobierno de Estados Unidos, estaba libre y sólo había pasado 28 años tras las rejas.
Desde su liberación, la DEA expresó su preocupación, pero este 23 de noviembre lo colocó en el primer lugar de la lista y ofrece una recompensa de 20 millones de dólares a quien otorgue información para capturarlo.
La institución mantiene los cargos por el caso Camarena. La acusación: “secuestro y asesinato de un agente federal, delitos violentos en ayuda del crimen organizado”. También enfrenta “cargos por distribuir marihuana y cocaína”.
Autoridades mexicanas también lo buscan. En enero de 2015, el Segundo Tribunal Unitario del Tercer Circuito con sede en Guadalajara, Jalisco, ordenó su inmediata reaprehensión.
En 2018, quien también es apodado como el “Príncipe del Narco” ofreció una entrevista periodística. En ella negó haber ordenado la muerte de “Kiki” Camarena. Trascendió entonces que vivía oculto en Sinaloa, evitando una nueva captura.
¿Qué pasó en el rancho “El Búfalo”?
El 6 de noviembre de 1984, en Allende, Chihuahua, el Ejército Mexicano ingresó a una finca de Rafael Caro Quintero, conocida como rancho “El Búfalo”. Ahí los militares hallaron 11 mil toneladas de marihuana. El mayor aseguramiento de esos tiempos. Se trataba de un sembradío de al menos 544 hectáreas.
Esto representó un golpe para el Cártel de Guadalajara. Caro Quintero consideró que el agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena, había sido el responsable de guiar a las autoridades mexicanas hasta el sembradío. Por ello, presuntamente, ordenó su secuestro y asesinato. Antes de asesinarlo, según la DEA, Camarena también fue torturado.