Ocupan el sitio de honor en la sala de miles de hogares durante la Navidad, sin embargo, los tradicionales árboles, algunos “naturales”, están por terminar su ciclo como adornos propios de la temporada.
“El árbol de Navidad significa el amor que se debe de tener entre las familias, ya que nos da la oportunidad de convivir y de crear algo completamente personal”.
Miguel González García, habitante de edificio residencial en la Ciudad de México.
Apenas pasa el Día de Reyes, los arbolitos navideños terminan en calles y depósitos de basura de la Ciudad de México, por lo que los servicios de limpia no se dan abasto.
“La gente tiene la intención de sacar este tipo de arbolitos a la calle. Pero hay ocasiones en las que no saben concretamente en dónde los pueden depositar. La gente nos lo puede entregar y nosotros, a su vez, podemos darlo al camión recolector de basura”.
Jesús Fabián, trabajador de limpia de la CDMX.
Las alcaldías de la capital del país tienen programas de reciclaje, una de ellas es la Venustiano Carranza.
“Invitamos a los ciudadanos de la alcaldía a que traigan a la explanada, a partir del 7 de enero y hasta el 23 de enero, sus árboles de Navidad para que nosotros los convirtamos en composta”.
Arturo Salmerón García, director general de Servicios Urbanos, Alcaldía Venustiano Carranza.
Los árboles de Navidad llegan a la explanada de la alcaldía. Ahí, 2 astilladoras se dan a la tarea de triturar de 300 a 400 arbolitos por día.
“La idea es que se cree composta para que nosotros podamos tirarla en los parques y se nutra nuevamente la tierra”.
Edgar Muñoz, director de Servicios Urbanos, Alcaldía Venustiano Carranza.
“Tengan la sensibilidad de tirar correctamente la basura, como lo marca la ley”, pide Jesús Fabián antes de reiniciar su labor de limpieza en las calles de la CDMX.