La Federación Marroquí de Fútbol (FRMF) protestó ante la FIFA por la actuación del árbitro mexicano César Ramos y aseguraron que su selección se vio privada de “dos penales indiscutibles” durante la semifinal del Mundial perdida contra Francia (2-0).
“La FRMF dirigió un correo a la instancia competente en el que regresa sobre las situaciones arbitrales que privaron a la selección marroquí de dos penales indiscutibles según la opinión de varios especialistas del arbitraje”, indica la federación marroquí.
Durante la semifinal Francia vs. Marruecos, la única tarjeta amarilla del partido, para el marroquí Boufal, por un contacto con el francés Theo Hernandez, fue demasiado severa en opinión de la FRMF. En otra acción, los jugadores marroquíes consideraron que Tchouaméni había sujetado a En-Nesyry por la cintura dentro del área.
La FRMF expresó su sorpresa por el hecho de que “los árbitros del VAR no hayan alertado al silbante” de esos posibles penaltis.
La federación marroquí “no escatimará ningún esfuerzo para defender y preservar los derechos de las selecciones nacionales, predicando la equidad en el arbitraje y denunciando esas decisiones arbitrales” de la semifinal, se puede leer en el texto.
César Arturo Ramos Palazuelos estuvo acompañado en el cuerpo arbitral por Alberto Morín Méndez, 1er asistente, Miguel Ángel Hernández Paredes, 2do asistente y Jesús Valenzuela Sáez como 4to árbitro.
De 38 años, Ramos, que ya fue árbitro en el Mundial de Rusia 2018, dirigió otros tres partidos en Qatar, entre ellos la victoria de Marruecos contra Bélgica (2-0).
Con su actuación, el silbante se convirtió en el quinto árbitro mexicano en dirigir una semifinal de Copa del Mundo, sumándose a lo realizado por Arturo Yamazaki, Antonio R. Márquez, Armando Archundia y Marco Antonio Rodríguez.
