Pamela Cerdeira comenta que fue a Acapulco y que las imágenes no hacen justicia al tamaño del desastre y sería imposible ver todas las imágenes de todo Acapulco al mismo tiempo y que prácticamente todo está destrozado.
La periodista dice que no solamente hablamos de los grandes edificios o de los hoteles, sino que pensemos en las casas de techo de lámina que “hoy son prácticamente inexistentes”.
Pamela Cerdeira recuerda que habían pasado 5 días del desastre y había personas que no había recibido ayuda y que llevaban cinco días sobreviviendo sin luz, sin agua, sin ningún tipo de comunicación.
“Me tocó ver ayuda, sí, me tocó ver un camión de la Marina recibiendo víveres de donativos ciudadanos, a otro entregando víveres de donativos ciudadanos, pero para el tamaño de la tragedia es insuficiente, como ponerle una curita a un enfermo que está prácticamente a punto de morir”.
Pamela Cerdeira
La periodista acotó que el problema es que esto será sumamente largo y a seis días del desastre la imagen era un Acapulco al que se le estaba acumulando la basura, los olores, no había maquinaria levantando, recogiendo; “más bien una especie de intento contención” de los pocos lugares donde había gasolina, de los pocos lugares adonde llegaba la ayuda.
“Esto será largo, muy largo”.
Pamela Cerdeira
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