La periodista Pamela Cerdeira, reflexiona sobre el video que se hizo viral este fin de semana, donde se ve al Dalai Lama, líder de la Administración Central Tibetana y del budismo tibetano, besando a un niño en la boca y pidiéndole que le chupe la lengua.
“El Dalai Lama besa a un niño que solamente pidió abrazarlo, después de besarlo en la boca, le dice que chupe su lengua, y solamente hasta que el video se hace viral, más de un mes después de que sucedieron los hechos frente adultos que no hicieron nada, ofrece una disculpa”.
Pamela Cerdeira, periodista
Los hechos registrados en el video que se viralizó este fin de semana ocurrieron el pasado 28 de febrero, y fue hasta este lunes que el Dalai Lama ofreció disculpas por lo ocurrido. Sin embargo, Cerdeira opina que “la disculpa es aterradora porque se disculpa por las palabras que pudieron haber lastimado, y luego dice que cuando se encuentra con personas generalmente bromea de forma inocente y juguetona”.
“Inocente y juguetona, ¿a cuántos adultos le habrá pedido el Dalai Lama de forma inocente y juguetona que le chupen la lengua?, ésa es la pregunta”.
Pamela Cerdeira, periodista
Porque, la periodista sostiene que “son esas palabras [inocente y juguetona] en donde se esconde generalmente el abuso sobre todo cuando se comete por un adulto que tiene cierto grado de autoridad, puede ser un maestro, puede ser el Dalai Lama, puede ser un sacerdote, puede ser un tío, puede ser un padre”.
“Ese tipo de personas a quienes quizá estaban jugando, quizás realmente me quiere, es lo que hace que las víctimas no hablen”.
Pamela Cerdeira, periodista
Por ello, Pamela Cerdeira cuestiona, ¿después de esto qué va a pasar?, en alusión a las posibles consecuencias que tendrá que el Dalai Lama besara a un niño en la boca.
