El arranque de la segunda mitad del sexenio de AMLO ya inició y cada día se ve más como está empoderando a Olga Sánchez Cordero.
Martha Anaya comenta que la sucesión adelantada a la que dio vista en las filas de Morena ha traído una serie de consecuencias y ajustes en las diferentes dependencias.
Nuestra analista señala que uno de estos grandes cambios se vio en la Secretaria de Gobernación, al iniciar este sexenio el presidente pensó en darle otro semblante a la SEGOB, un tinte más humano y por eso eligió a la ministra de la Suprema Corte, Olga Sánchez Cordero, para encabezarla.
“Además de darle un corte humanista su idea esencial era poner a alguien en la sucesión presidencial, ubicar a alguien que no tuviera precisamente esas ansias por la silla presidencial y le funcionó”, comenta Anaya.
El equipo de Olga Sánchez Cordero tenía registrado que en esta segunda parte del sexenio ella regresaría al senado y abriría las puertas a otro de los posibles candidatos a la presidencia de México.
Sin embargo, no ha sido así y ahora el mandatario mexicano decidió no quitarla de su puesto por lo menos en este momento, además de que la está empoderando cada día más y es bastante visible ese apoyo en exceso que le está brindando.
“Ahora parece haber una muralla china para otro contrincante para la sucesión presidencial y parece increíble, ya que ahora la está empoderando a pesar de no haberlo hecho en los años anteriores”, finaliza la analista.