La noche del 15 de abril, elementos de la policía capitalina recuperaron el inmueble de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) tomado por mujeres encapuchadas en la calle República de Cuba, en el Centro Histórico de la Ciudad de México (CDMX).
El secretario de Seguridad Ciudadana de la CDMX, Omar García Harfuch, informó que la policía arribó al lugar “derivado de la denuncia por agresiones en la calle de República de Cuba”.
Las instalaciones del inmueble de la CNDH quedaron visiblemente afectadas por las ocupantes encapuchadas, donde hubo pintas, un altar, botellas vacías, mobiliario destruido y hasta semáforos.
Ante lo ocurrido, la analista política, María Amparo Casar, habla sobre el tema.
“Ya es hora de comenzar a entender que retomar unas instalaciones, en este caso de la CNDH, no es un acto de represión”.
María Amparo Casar, analista política
Menciona que la policía es quien debe poner el orden siguiendo la línea de la legalidad.
“Para eso existen las policías en todo el mundo, para poner orden, desde luego dentro de la legalidad y con el uso de la fuerza proporcional, tal y como marca la Ley”
María Amparo Casar, analista política
Luego de 19 meses en los que la Comisión Nacional de Derechos Humanos estuvo tomada, señala que no hay un motivo para que continuaran así.
“La CNDH puede funcionar fuera de sus instalaciones, pero realmente no hay motivo ulterior, inicialmente se podía haber entendido la toma de la CNDH, pero no hay nada que justifique 19 meses con esas instalaciones tomadas”.
María Amparo Casar, analista política