El doctor Luis Rubio señala que “la pandemia es uno de esos eventos que acontecen y que a todo el mundo los afecta de la misma manera”, sin embargo, destaca que la forma de responder a la contingencia sanitaria es distinta entre cada país, y cita la forma de atenderla en México.
Para ver la diferencia en la forma de responder a la pandemia, el experto compara lo hecho en China, Suecia y algunos países europeos:
“China estuvo dispuesta a meter en sus casas y a forzar con violencia a todo el mundo a quedarse dentro de sus casas durante ocho semanas, Suecia que intentó un esquema mucho más liviano o algunos países europeos que impusieron confinamientos obligatorios y acciones gubernamentales”.
Asimismo, nuestro colaborador menciona lo ocurrido en algunas regiones de Asia, donde no hubo confinamientos pero sí la implementación de recursos tecnológicos.
En contraste a estas acciones, el analista político cita el caso de México y dice que “México se distingue dramáticamente por el dogmatismo y la forma en que lo ha conducido”.
“Todos los demás países del mundo se han adaptado, han tratado de ir corrigiendo los errores que fueron cometiendo en el camino, en México me parece que es claro que desde el primer día aunque nunca lo dijeron o siguen sin decir, es que realmente se ha intentado que todo mundo se vaya contagiando poco a poco para que eventualmente haya lo que se llama una “inmunidad de rebaño”, es decir, que todo mundo haya pasado por la enfermedad y con eso ya no haya un crecimiento mayor de la pandemia”.
Sin embargo, el doctor Rubio resalta que “el problema de ese planteamiento es que en la práctica es falaz, porque a diferencia de otras enfermedades lo que parece demostrar la experiencia de todo el mundo es que la inmunidad no es permanente”.
“Para que haya esta ‘inmunidad de rebaño’ tendría que ser una inmunidad permanente como es el caso de enfermedades como el sarampión o la viruela, donde una vez que se tiene esa enfermedad, no se vuelve a tener nunca más, pero no parece así el caso del coronavirus”.
El experto cree que había mejores estrategias que el gobierno mexicano pudo haber seguido para combatir la crisis sanitaria.
“Lo que seguro es un error es pensar que se va a poder enfermar todo el mundo y con eso ya no va a crecer el virus, pero la evidencia dice que esto no es así, por lo tanto la estrategia que ha seguido el gobierno es una errada porque se corre el riesgo de no resolver el problema y que siga creciendo el número de casos sin tener la capacidad de atenderlos”.
Finalmente, Luis Rubio opina que otro punto en el que México es distinto y es consecuencia de la anterior “es en el enorme número de muertes a causa del COVID-19” y la razón de ello es “la calidad del servicio de salud, no por quienes lo proveen, sino por los impedimentos del gobierno”.
“Este es un verdadero ejemplo de lo que una mala política pública puede ser, de un gobierno que no está dispuesto a atender los problemas de fondo y se apega a dogmas y no a soluciones, esa es una manera errada de resolver los problemas, y como ejemplo de ello está el resto del mundo”.
