El doctor Luis Rubio, experto en economía analiza qué pasa con el gasto público y los impuestos en el actual escenario de México, a propósito de la reforma fiscal.
“La recesión que caracterizó la economía mexicana el año pasado y la poca inversión que se está dando en este momento, implican que el gobierno va a tener cada vez menos recursos para llevar a cabo los proyectos que tenía planeados”.
Al haber menos recursos para el gobierno, nuestro colaborador explica que hay dos maneras de solucionar esto:
“Una forma de solucionar esto es incrementando los impuestos para todos los ciudadanos, la otra es dejar de gastar en cosas que no son necesarias o no son útiles”.
Sobre el aumento en los impuestos, el experto señala que “la naturaleza de los políticos es siempre cargarle más la mano a los ciudadanos porque es lo más fácil, en vez de decidir que es prioritario y qué no lo es”.
“Para los gobiernos es más sencillo decir: ‘mejor que paguen más impuestos los ciudadanos’”.
Y advierte que “esa discusión la vamos a tener todos estos años y hay muchos, particularmente en el partido gobernante que lo que quieren es incorporar impuestos confiscatorios para poder zanjar sus gastos y resolver los problemas que tiene”.
Luis Rubio opina que “es posible que algunos impuestos deban ser elevados y que otros nuevos deban crearse, por ejemplo tener un impuesto más elevado para el predial”.
Pero también asegura que “simplemente cargarle más impuestos a la ciudadanía, sin dejar de gastar en proyectos innecesarios como la nueva refinería, el nuevo aeropuerto o Pemex es verdaderamente costoso para la economía mexicana, es pernicioso y sería escandaloso que lo intentaran hacer”.
“Cualquiera que conozca las leyes más elementales de la economía sabe que no por cobrar más, se recauda más”.