El periodista Luis Rubio expresa que el “orden y desorden” son dos características que conforman la realidad cotidiana en México. Desde su punto de vista, este paradigma provocó que, durante muchos años, existieran gobiernos autoritarios que en la actualidad son difíciles de vislumbrar.
¿Qué es el “orden y desorden” mexicano?
En videocolumna para Unotv.com, nuestro colaborador explica que la vida cotidiana de los mexicanos se conforma por el principio del “orden y desorden“, que consiste en reglas y la ausencia de ellas.
“Hay espacios en nuestra vida cotidiana en México que tienen gran claridad de orden, donde hay reglas del juego que funcionan, que se hacen cumplir y hay otros muchos espacios en los que el desorden es muy grande; incluyendo los temas de mordidas, de criminalidad, de violencia, de cobro de piso, de abuso”.
Luis Rubio
El desorden consiste en las personas que no cumplen con “las reglas del juego“, como aquellas que manejan en la calles del país. En este sentido, el “orden y desorden” mexicano explica cómo es el comportamiento cotidiano dentro y fuera de su país.
“Muchos mexicanos que salen del país empiezan a comportarse diferente porque entienden que las reglas del juego funcionan de maneras distintas a como lo hacen en las ciudades de nuestro país”, dice Luis Rubio.
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¿Cómo lograr el orden sin autoritarismo?
Luis Rubio también argumenta que el “orden y desorden” ha causado la tiranía en el país a lo largo de su historia, con la intención de reprimir a la anarquía.
“Esa es la razón por la que México tuvo muchos años de gobiernos autoritarios, porque el miedo al al desorden el miedo a la anarquía era tal que los gobiernos trataban de mantener todo bajo control mucho de lo que ha tratado de ser presidente”.
Luis Rubio
Nuestro columnista también apunta que Andrés Manuel López Obrador, actual presidente de México, pretende recuperar el control absoluto, centralizando las decisiones con la misión de establecer sus propias reglas del juego.
Desde su perspectiva, eso funcionaba antes, pero describe a la República Mexicana actual como “un país enrome con grandes diferencias, enorme diversidad económica” y con características cotidianas diferente en las distintas regiones del país. Razón por la que el orden absoluto ya no podría funcionar.
Finalmente, dice que es difícil lograr el orden sin llegar al autoritarismo. Por esta razón, llama a seguir otros ejemplos como España, nación que logró limpiar su sistema de gobierno después de años de corrupciones, abuso, autoritarismo y una cultura similar a la mexicana.
“Es claro que podríamos cambiarlo, no seríamos los únicos que no hemos intentado y los chilenos han avanzado mucho. Costa Rica ha avanzado mucho con una cultura similar a la nuestra. Es perfectamente posible pasar de una enorme desorden a un menor desorden y poco a poco a un mayor orden”, remata.
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