Luis Rubio analiza el aviso del presidente Andrés Manuel López Obrador de no asistir a la Cumbre de las Américas y solo enviar una representación de su gobierno en el caso de que Estados Unidos no extienda la invitación a Cuba, Nicaragua y Venezuela, países que fueron excluidos.
“Esto me parece que nos hace ver las cosas desde dos posibles ángulos: la primera sobre cuál es el interés de México en su relación con Estados Unidos; por otra parte veo una contradicción del presidente”, opina Rubio.
Rubio agrega que México debe mantener una buena, estrecha y funcional relación con los estadounidenses por la cercanía, pero también porque el motor de la economía del país son las exportaciones.
Además, expresa que no asistir a la Cumbre de las Américas puede tener consecuencias para el país. Y agrega que por una parte, López Obrador busca unir Latinoamérica, pero por otro, divide al país.
“México jamás va a ser ese líder de América Latina”, concluye el especialista.
El aviso del presidente sobre su presencia en la Cumbre de las Américas
El presidente dijo el pasado 10 de mayo que si se excluye a Cuba, Nicaragua y Venezuela de la Cumbre de las Américas, no acudiría a la reunión multilateral en rechazo a la política excluyente y en defensa de la fraternidad.
Sostuvo que no es adecuado pensar una reunión de esta índole sin la participación de todos los países del continente, argumentó el mandatario mexicano.
“No estamos para confrontación, estamos para hermanarnos, para unirnos, y aunque tengamos diferencias las podemos resolver cuando menos escuchándonos, dialogando, pero no excluyendo a nadie”
Andrés Manuel López Obrador, presidente de México
También aseguró que nadie tiene el derecho de excluir a los demás, aseveró López Obrador y descartó afectaciones de la relación entre México y Estados Unidos por esta decisión.
