Luis Rubio reflexiona sobre la decisión que tomaron algunas redes sociales de cerrar de forma definitiva las cuentas del presidente Donald Trump, después de los disturbios ocurridos en Washington D.C. el pasado 6 de enero, durante la certificación de Joe Biden como presidente electo y hace un comparativo con lo que ocurre en México y la libertad de expresión.
“Al cancelarle las cuentas de Twitter, Facebook y otras al presidente Trump estas empresas cometieron un error, han creado un precedente tremendamente preocupante en el cual la política puede pasar a convertirse en un tema de quien está a cargo y quien puede hablar en función de ello”.
Sobre esto, el experto destaca la crítica hecha por el presidente de México Andrés Manuel López Obrador y afirma que el mandatario tiene razón:
“No hay razón alguna para limitar la libertad de expresión de nadie, gobernante o ciudadano, de hecho la libertad de expresión es la apertura que nos permite expresarnos, comunicarnos y conocer las posiciones de otras personas”.
Y aclara que la libertad de expresión no es un derecho absoluto y cita un ejemplo.
Nuestro experto cree que “decir lo que se piensa o lo que uno cree, el atacar y el criticar es absolutamente relevante y válido” y un ejemplo de esto es lo que hace el jefe del ejecutivo mexicano.
“El presiente López Obrador con frecuencia ataca y amenaza a las personas que lo critican y en eso está violando una regla fundamental pero tiene derecho y libertad de hacerlo”.
Para Luis Rubio el precedente que se establece con el cierre de las cuentas de Trump es inaceptable. “De hecho lo gobiernos tienen la obligación de crear condiciones para que los ciudadanos puedan expresarse, para que haya un libre intercambio de ideas y exista una expresión plena de la sociedad y se conozcan todas las posturas, pues de esta manera se puede progresar”, señala.
“Hay evidencia absoluta de que las sociedades donde hay libertad de expresión y libertad económica progresan y prosperan mucho más rápido que las que no lo son”.