“El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) lleva semanas atacando todos los días diversos aspectos de los Estados Unidos”, asegura Luis Rubio, quien destaca que esta actitud del mandatario contrasta con “su misión durante la época de Donald Trump”.
Para el experto, esto “es algo extraño porque México resolvió el tema de su relación con Estados Unidos para bien o para mal hace 40 años en la década de los años 80 cuando se reconoció que la solución a problemas fundamentales que tenía México, económicos, de inflación, de seguridad, de frontera, se podían resolver sólo en concurrencia y acuerdo con los americanos”.
Sin embargo, el analista señala que “hoy en día, el presidente (AMLO) es el primero desde esa época que ha regresado aquel discurso viejo Nacionalista Revolucionario de atacar a los americanos y culparlos de nuestros males”.
“Nuestros males son reales pero no tienen que ver necesariamente con los americanos, por supuesto que hay cosas que se derivan de la relación como pueden ser las drogas que no es un tema menor, pero también ahí la solución reside en entendernos con los americanos, en arreglar la manera cómo vamos a resolver nuestros problemas con ellos”.
Luis Rubio, analista
Además, de que, según dice también es importante “cómo vamos a resolver los problemas que son mexicanos y tienen que ver con la seguridad, la justicia y el crecimiento económico que son los temas que el presidente mencionó cuando él estaba contendiendo por la presidencia en 2018 y que sin embargo no ha atacado y no ha resuelto”.
“El punto de fondo es que los americanos no son nuestro problema, es fácil envolverse en la bandera, pero eso puede tener consecuencias muy graves”.
Luis Rubio, analista
Un ejemplo de que “la mayor parte de los mexicanos están reconciliados con la relación con los americanos, son las remesas, por supuesto que el presentador tiene nada que ver con las remesas esas vienen por otras razones, pero el hecho de que vengan es testimonio de que hay una población enorme en México que ve a los americanos como una solución a sus propios problemas personales”.
Por ello, Luis Rubio deja en claro que “lo que pasó en los 80 fue que México como país, como gobierno y sociedad reconoció que Estados Unidos era parte de la solución y no parte del problema”, por ello, “atacar a los americanos, no nada más no resuelve nada, sino que crea un ambiente interno terriblemente pernicioso que puede llevar a los peores excesos”.