Se cumplen dos años del gobierno del presidente López Obrador y para el periodista Javier Solórzano hay muchas cosas que plantearse.
“Se han cambiado muchas formas, como la comunicación, las formas de entendimiento, la relación del Presidente con la sociedad y las Mañaneras son sin lugar a dudas el eje central del proceso de comunicación del Presidente“
Sin embargo, hay otra parte que tiene que ver con el ejercicio del Poder y con lo que pasa con los ciudadanos y la gran pregunta es: ¿los ciudadanos vivimos mejor, peor o igual de lo que estábamos antes?, señala Solórzano.
“Es muy probable que haya sectores de la población que se sientan afectados, pero también hay quienes (como la tercera edad, mujeres y adolescentes) que son beneficiados con la gestión de López Obrador”
El periodista asegura que en todo lo que se ha venido haciendo también hay limitaciones. Una de ellas es la entrega del dinero y su afectación en la burocracia, que cada vez se siente intimidada.
“También está el tema de la seguridad, la economía; que se encuentra en una especie de impase. Dos años son muy pocos para lo que pretende el Presidente, pero dos años ya cuentan para su tiempo de gracia, de gobierno, de ser quien ejerce el poder“
El Presidente ya tiene dos años ahí sentado y hay muchas cosas que corren en su contra, por más que la popularidad sea un fenómeno muy interesante de leer, que a veces cuesta trabajo entender ese 60%, pero que es importante revisar, señala el periodista.
“Es importante revisar ese 60% pero también hay muchas críticas que empiezan a surgir en las encuestas de la forma en que se gobierna, de los resultados de la gobernabilidad”
Solórzano dice que el Presidente sigue siendo una esperanza que es auténtica, genuina, real que tiene que ver con amplios sectores de la población. Es esa esperanza de que las cosas son diferentes, es un Presidente al que se le ve honesto, se le ve que está atacando los problemas, que no se deja y eso también forma parte de lo que la gente quiere de él.
“El balance es difícil de hacer, pero es un balance de luces y sombras y las sombras a veces se empiezan a pesar más sobre el ejercicio de la gobernabilidad cotidiana del Presidente”
El periodista asevera que hay muchas cosas por reflexionar, pensar y platicar, pero ya van dos años y faltan cuatro. El tiempo ya corre contra el Presidente o a favor y el cambio en este momento para la sociedad mexicana sigue generando dudas.
