Javier Solórzano dice que se ha venido una nueva discusión entre el gobierno de México y, en algún sentido, el gobierno de Estados Unidos, donde AMLO ubica a Joe Biden, dentro de todo este proceso, como un respetuoso de la soberanía, pero a integrantes de su gobierno los señala, indirectamente al secretario de Estado, Antony Blinken, y lo que está dentro de la jefatura de dicho departamento, que se encarga de todo tipo de informes.
“Es cierto en lo que dice el presidente mexicano de que Estados Unidos todavía juega el juego el papel de rector general del mundo, pero éste lo ha negado y señaló que ellos no meten sus retos abajo de la mesa”.
Javier Solórzano
Solórzano menciona que cuando a Blinken le preguntan en el Senado, de manera directa, “algunas comunidades en México son manejadas como ‘narcoestado’ y dice que sí; cuestión que molesta, pero que así es.
El periodista recuerda que el gobierno de Estados Unidos, vía el Departamento de Estado, presenta un informe sobre la condición de los derechos humanos en el mundo, y no solamente en México; el informe que es muy interesante revisarlo a detalle, no solo está cargado de estos elementos que el presidente ha puesto en la mesa para decir que el informe es un “bodrio”.
“El informe también tiene, como un elemento central, muchas de las cosas que se han venido haciendo en México en la gran batalla por la defensa de los derechos humanos y lo que sucede es que el presidente no le gusta que le toquen nada y no quiere salir de su narrativa, que eso es uno de los grandes asuntos”.
Javier Solórzano
Tanto el presidente como Estados Unidos responden y López Obrador apela con muchos argumentos, en termino de que estas ideas que prevalecieron por mucho tiempo prevalecieron, y con razón, del “imperialismo yanqui” y nadie puede negar el papel que jugaba Estados Unidos, en ese sentido, en el mundo, en América Latina, pero hoy las condiciones tienen otras vertientes “no es que no debamos tener los ojos abiertos, sino que tienen otras vertientes”.
Las vertientes entre las relaciones entre México, Estados Unidos y el mundo
Solórzano dice que esas vertientes tienen que ver con muchos elementos que hoy cambian con la dinámica de las naciones y sus gobiernos responden “no es lo mismo ver hoy a Estados Unidos, como lo veíamos en los 80, pero hay un espíritu de intromisión, pero también con una concepción de un papel que presume debe de jugar la potencia más importante del mundo”.
El periodista destaca que la respuesta del presidente, en lugar de argumentar, cae en un terreno airado y el gran problema es la falta de autocrítica.
“Un proceso de autocrítica diría ‘revisamos el informe, tiene muchos elementos para atender, pero muchos otros que no compartimos”.
Javier Solórzano
Pero ahí entra otra pregunta: “¿Si el informe si lo hubiera hecho cualquier otro tipo de organización, la ONU, la Comisión Internacional de Derechos Humanos, tendría las mismas fuentes, los mismos elementos y las mismas circunstancias, entonces tampoco valdría? se cuestiona Solórzano.
“¿Lo que Estados Unidos nos informa es cierto o no? y el presidente dice que no hay agresión contra los periodistas”.
Javier Solórzano
Solórzano menciona que el concepto de libertad de expresión es integral, no es un derecho absoluto. “Es integral porque es igual de importante que un Estado garantice que los periodistas expresen sus ideas, como crear condiciones”.
“Entonces si hay agresión para los periodistas, el presidente puede decir ‘no nos metemos con la libertad, sí, pero no se les da condiciones para que ejerzan su profesión”.
Javier Solórzano
Para terminar, Javier Solórzano dice que “nos estamos metiendo en una confrontación, porque si tuviéramos la capacidad de ver lo que hacemos de manera autocrítica, para exigir lo que ellos también deben de hacer, en materia de seguridad, internamente; las cosas no están muy bien; las cosas cambiarían”.