El periodista Javier Solórzano asegura que “estamos pasando un proceso muy complejo porque las instituciones que hemos ido construyendo a lo largo de los últimos años están pasando por cuestionamientos y por presiones derivados de que el presidente, quiere hacer cosas y esta institucionalidad no lo permite de manera unilateral”, por ello dedica su videocolumna del día de hoy a resaltar la importancia de la institucionalidad en México.
Solórzano señala que a nivel institucional “tienen que hacerse las cosas a través de consensos” pero que es eso justamente lo que “al presidente no le gusta”, porque “quiere decidir y poco le importa si existen tribunales”.
Pero, dice el periodista, “cuando los tribunales, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), institutos autónomos, etcétera, determinan cuestiones contrarias a lo que él quiere, inmediatamente son calificadas y se colocan en el terreno de: lo faccioso, en el terreno de que son manipulados, están pensando nada más en ellos, es el poder, quieren regresar a los viejos tiempos, y esto, sostiene, “no necesariamente es así, aunque en algunos casos pudiera pasar”.
“La impresión de los últimos años que he tenido y he visto desde dentro es que, las instituciones autónomas lo que han tratado de buscar es hacerse más transparentes a la sociedad, hacerse más lejana para las decisiones importantes de los gobiernos, para que los gobiernos también sean evaluados y tengan que rendir cuentas”.
Javier Solórzano, periodista
Dos ejemplos de esto es que “llama la atención que en el Tribunal Electoral algunos de sus integrantes digan que hubo muchas presiones para que conservara el poder la actual dirigencia de Morena y se pudiera ir hasta el año que entra, cuando tendría que dejarlo, según sus propios estatutos, en el mes de octubre”.
Y que, con lo ocurrido con la Reforma Electoral y el llamado “Plan B”, el Instituto Nacional Electoral (INE), trató de defender al Instituto en sus orígenes, espíritu y desarrollo.
Sin embargo, Solórzano sostiene que “aquí lo que está pasando es que la institucionalidad, el presidente la ve como un dique para gobernar, sin embargo, esa institucionalidad es lo que frena que el presidente decida de manera unilateral”.
“El presidente tiene forzosamente que pasar por mecanismos propios de la gobernabilidad y del Estado, que es un país como el nuestro, entonces lo que va a venir va a ser más rudo porque se está acabando el sexenio”.
Javier Solórzano, periodista
“Y entonces en este fin de sexenio lo que se va a tratar de hacer es presionar al máximo para poder instrumentar todos los proyectos que tiene el presidente”, dice el experto, quien indica que además, “de manera paralela está sucediendo algo y es que, en este proceso de avanzar, el gobierno también se ha convertido en un ente opaco que no nos cuenta todo.
En suma, termina Javier Solórzano, “la institucionalidad sirve para gobernar no es un estorbo lo que sí puede ser un estorbo es para quien quiere gobernar de manera unilateral.”