Javier Solórzano explica que el estilo personal de gobernar ha sido un tema recurrente en la política mexicana, especialmente bajo la administración del presidente actual, lo que será un gran desafío para la próxima presidenta Claudia SheinBaum.
El periodista señala que el enfoque de AMLO es caracterizado por su tono confrontativo y una retórica que a menudo busca desacreditar a quienes no comparten su visión; por lo que el periodista plantea interrogantes cruciales sobre el futuro liderazgo de Claudia Sheinbaum.
“El Presidente tiende a desacreditar, no con mucha facilidad dice que lo mejor que puede pasar ahorita con el Poder Judicial es que se vaya a paro, porque así no liberan a los delincuentes de lo que él llama cuello blanco”.
Javier Solórzano
Uno de los retos más importantes que enfrentará Sheinbaum, según Solórzano, es decidir si continuará con esta “descalificación constante” o si optará por un camino más sensato y cuidadoso.
La importancia del lenguaje en la política no puede ser subestimada.
“Una palabra u otra palabra tiene un efecto y la forma en que se dicen las palabras tiene un efecto que se vuelve sumamente inquietante porque puede… ser insulto al otro, o puede ser al mismo tiempo un reconocimiento al otro”.
Javier Solórzano
El lenguaje usado por el presidente no solo ha polarizado a la sociedad, sino que también ha creado un ambiente en el que el diálogo se ha vuelto casi imposible.
Para Sheinbaum, adoptar un estilo de gobierno que fomente el diálogo y la inclusión será clave para evitar una mayor fragmentación.
“Claudia tendría que cambiar mucho esta parte, tendría que buscar más conciliación, tendrá que buscar inevitablemente el diálogo con la oposición”.
Javier Solórzano
El desafío para Sheinbaum radica en entender que, aunque fue elegida con una mayoría significativa, “un 46% no votó por ella”, lo que indica una sociedad dividida que requiere de un liderazgo capaz de integrar y no de excluir. La manera en que aborde esta división será crucial para el futuro de la democracia en México.