Entre los puntos de la Reforma Electoral propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador, está la elección de consejeros y magistrados. En el documento señala que cada uno de los tres Poderes de la Unión: Ejecutivo, Legislativo y Judicial, presentarán 20 perfiles de candidatos a consejeros del INE, y 20 a magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
En total serán 60 candidatos a consejeros y 60 a magistrados; se votarían en elecciones abiertas; el que más votos obtenga, será el presidente del Instituto y el Tribunal.
Para nuestro analista, Carlos Elizondo, significaría que en la elección presidencial estaría estrenando un nuevo modelo.
Y eso, en sí mismo pone en riesgo lo más importante que tiene el país, que es la certidumbre democrática.
Además, opina que ninguna de las cosas que están proponiendo resuelve los problemas que sí tiene el sistema electoral, ¿cuáles? la partidocracia.
Partidos que toman decisiones poco democráticas al interior de ellas. No hay nada nuevo. Al contrario, se relaja el costo de las elecciones. Los quieren reducir, pero al mismo tiempo nos van a meter el costo de nuevas elecciones para consejeros. y eso cuesta, y hacerlo bien, cuesta mucho dinero.
Carlos Elizondo explica que al partido en el poder le parece fácil reducir el dinero que los partidos reciben cuando no hay elecciones, porque ellos tienen el apoyo del partido del poder. Por eso se construyeron estos métodos, para que el PRI, en su momento el partido en el poder, no tuviera la ventaja de tener los recursos del sector público, del gobierno y todo lo que eso conlleva.
Ahora, el partido mayoritario tiene más posibilidad de movilizar a sus electores para que ganen los consejeros que quieran, y entonces terminas con un organismo electoral que representa la visión de la mayoría y lo que necesitamos es un organismo electoral y un tribunal que represente todas las voces, todas las visiones y que no sea resultado de la imposición mayoritaria, sino de la integración también de los intereses.