La forma en que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador da las “mañaneras”, no es precisamente un reporte. Para nuestra analista política, las presentaciones de algunos secretarios Federales incluso son bastante anodinas, y en la mayoría de las veces es el mandatario quien interviene.
En dichas intervenciones, el presidente, dentro de sus propios actos, o “informes matutinos”, incluye adjetivos, descalificaciones o calificaciones a favor de aquello que aprueba.
La verdad de las cosas, hay muchas maneras de comunicar la parte política o informativa del Gobierno hacia la sociedad; no es necesario tener al presidente de la República todas las mañanas contando su versión de la historia, de sus datos.
Alejandra Cullen, opina que en apoyo al INE, hay un tema adicional que es la consulta. La consulta, que si bien no quedó la pregunta como el presidente quería, permite que el mandatario se pase, de manera constante, a lo largo de sus mañaneras, haciendo referencia a este tema de impugnar a los líderes del pasado.
Esto se vuelve una estrategia electoral para convencer a sus seguidores de que la 4T es la mejor opción.
