La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ratificó la validez de la elección de la gubernatura de Tamaulipas y confirmó el triunfo del morenista Américo Villarreal Anaya, quien el próximo sábado 1 de octubre tendrá que rendir protesta como gobernador.
Para nuestra analista Alejandra Cullen, todo lo que se vivió en últimos días en el Senado pareciera una especie de jugada del PAN donde el mismo gobernador saliente mete presión y lo único que se logra es evidenciar a Américo Villarreal.
En el TEPJF desestimaron la queja presentada por el Partido Acción Nacional (PAN) por una presunta inelegibilidad de Américo Villarreal por haber regresado a sus funciones como senador de la República.
“No salgo de mi sorpresa, de la velocidad a la que salió apabullado en busca del fuero del Senado, que ni siquiera había perdido. Nadie le dijo, tienes fuero, claro, pero en qué momento pensó que ya no era senador y que lo había perdido; y cuánto habrá sido su miedo que salió corriendo”.
Luego de que, en la sesión del martes 27 de septiembre, la Mesa Directiva del Senado comunicó a la asamblea la reincorporación de Américo Villarreal, con efectos desde el lunes 26, esta mañana circuló un oficio en el que, con fecha del 27 de septiembre, a las 13:05 horas, Américo Villarreal comunicaba al presidente de la Mesa Directiva del Senado, Alejandro Armenta, su desistimiento de la solicitud para reintegrarse a su escaño.
Tamaulipas es uno de los estados con mayor violencia del país, con mayor nivel de transacción y de comercio con Estados Unidos; comercialmente es importantísimo y en términos de violencia se ha llevado, la atención pública los últimos 15 años, donde no acaban de matarse los cárteles y los distintos grupos de crimen organizado, donde hay varios exgobernadores que han ido a la cárcel y Américo Villarreal tiene acusaciones por vínculos con el crimen organizado.
Américo Villarreal Anaya deberá tomar funciones como gobernador de Tamaulipas el próximo sábado 1 de octubre.