“La república de las letras está de luto”, asegura el embajador de México en el Vaticano, Alberto Barranco, y es que, dice “la muerte alcanzó a unos días de cumplir 99 años a la poeta Dolores Castro Varela, una mujer que por décadas forjó a escritores y poetas”.
“Una maestra de toda la vida, a la que se le veía todavía hace tres años en sus talleres de literatura en la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Pero también, hasta hace poco tiempo, teniendo ya 90 años, subía los tres pisos que separaban el aula donde impartía su catedral inolvidable”.
“Dolores Castro fue integrante de un grupo de poetas católicos, llamado ‘Los ocho’, ahí estaba Rosario Castellanos, a quien había conocido en las aulas del Palacio de los Mascarones. Ahí estaba también Roberto Cabral del Hoyo, Octavio Novaro, Alejandra Avilés y también Javier Peñaloza, quien fuera su marido y con quien procrearía siete hijos”, asegura Barranco.
Nuestro colaborador asegura que “Dolores Castro Varela con sus 13 libros se haría acreedora al Premio Nacional de Arte y Literatura en su rama de lingüística y literatura, también podemos hablar del Premio Iberoamericano de Poesía ‘Ramón López Velarde’ y de la Medalla ‘José Emilio Pacheco’, entre otros muchos”.
“Ella en su poesía daba cuenta de su vida, daba cuenta de las vicisitudes que había tenido, pero también daba cuenta de los dolores de México, por ejemplo, aquel trágico 2 de octubre del año de 1968, la Matanza de Tlatelolco”.
Alberto Barranco asegura en esta sentida reflexión en honor de Dolores Castro Varela, que “ahí estaba la voz de ella para en su momento denunciar, hablar por ejemplo los derechos de la mujer, ahí estaba también la mujer que tenía, que sabía dar y recibir todo tipo de sentimientos hacia el interior de las personas”.
“Dolores Castro Varela en su larga vida alguna vez escribió: ‘qué es lo vivido, en qué ráfaga se perdió’”.