En el marco del Día Mundial de la Hipertensión Arteríal, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) dio algunas recomendaciones a las personas que padecen la enfermedad, a fin de que su salud no se vea afectada por la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19) en México.
La Máxima Casa de Estudios detalló que "la población debe medir su presión arterial al menos una vez cada seis meses, pues esta enfermedad es asintomática" lo que coloca a las personas que la padecen, en uno de los sectores más vulnerables ante el COVID-19.
La hipertensión arterial es un factor de riesgo para la evolución de la COVID-19, por lo que es fundamental que las personas con este padecimiento continúen sus tratamientos.
Para evitar mayores afectaciones de salud, los hipertensos deben tener control de su presión arterial, seguir en contacto con sus médicos y cuidar las comorbilidades, como obesidad, diabetes y enfermedades renales, dijo en el marco del Día Mundial de la Hipertensión Arterial, que se conmemora este 17 de mayo.
Aunque estén controlados, la hipertensión implica cierta vulnerabilidad inmunológica; por ejemplo, los enfermos tienen disminución de unas células especiales llamadas CD8, importantes para evitar efectos de diferentes virus", subrayaron especialista de la UNAM.
Hipertensión en México
En México, uno de cada cuatro adultos padece esta enfermedad crónica (ENSANUT 2016), pero en los grupos socioeconómicos más desfavorecidos alcanza hasta 50 por ciento.
Además, la mitad desconoce que son hipertensos, y de la población que lo sabe, sólo dos terceras partes toman medicamentos para tratarla. "En este grupo hay una tercera parte que a pesar de tomar medicamentos no tiene la presión arterial controlada", remarcó.
El también director de Cardiología del Centro Médico ABC expuso que esta enfermedad no genera síntomas en la mayoría de los pacientes, pero con el tiempo afecta diferentes órganos como el cerebro, el corazón, los riñones y la retina, por el daño a los vasos sanguíneos pequeños.
La hipertensión arterial es una enfermedad principalmente hereditaria. El 92% de los casos se debe a factores genéticos y se catalogan como hipertensos esenciales o primarios. El otro ocho por ciento son hipertensos secundarios, pues su padecimiento se debe a afecciones renales o problemas endócrinos, entre otros.
RECOMENDACIONES
Académicos de la UNAM recomendó a la población medir su presión arterial al menos una vez cada seis meses, pues la enfermedad es principalmente asintomática.
Además, acudir al médico si hay síntomas como sensación de aturdimiento, sofocación, mareo, dolor de cabeza, zumbido en los oídos o sangrado nasal.
Refirieron que estos pacientes necesitan modificar su estilo de vida para reducir de peso, disminuir el consumo de sal e impulsar el ejercicio físico. Además, llevar tratamiento farmacológico, que es diferente para cada persona.
Uno de los problemas es que algunos lo abandonan por la incomodidad de tomar varias medicinas al día, pero sobre todo, por el costo de los medicamentos".
Finalmente, el universitario llamó a crear conciencia sobre esta enfermedad, principalmente en países en desarrollo como México, pues es un problema relacionado con el desarrollo socioeconómico de cada nación.