Los alumnos de una escuela de Pekín no tienen un profesor cualquiera, de hecho, su maestro mide sólo 60 centímetros de alto, tiene la cabeza redonda y su cara es una pantalla táctil que cuando se entusiasma es capaz de poner dos corazones en lugar de ojos.
Su nombre es Keeko y es uno de los 600 robots que dan clases en 600 colegios de China. Entre sus principales labores está contar historias y proponer ejercicios de lógica a los niños, los cuales muchas veces no pueden parar de reír al recibir clase.
Aunque no tiene brazos y es regordete, este pequeño robot reacciona con entusiasmo por cada respuesta correcta. Es precisamente su diseño lo que hace que este androide sea verdaderamente entrañable y que los alumnos se familiaricen rápidamente con él.
De hecho, en en este país de oriente ya existen autómatas que realizan las compras, acompañan a los ancianos e, incluso, informan sobre las leyes. Sus creadores sueñan con que este robot color blanco, que se desplaza rodando y se orienta por sus cámaras integradas, un día llegue a ser el asistente educativo en todas las aulas de China y otros países de Asía.
El costo de los robots Keeko es de 10 mil yuanes, lo que equivale a mil 498 dólares, un costo muy semejante al sueldo mensual de un maestro. Sin embargo, para algunos directivos escolares todavía pasará tiempo antes de que los robots sustituyan a los profesores de carne y hueso, aunque la ventaja de los androides es que son más estables emocionalmente en comparación con los humanos.
Robots chinos
En el marco de su programa "Fabricado en China 2025", Pekín destina grandes cantidades en el sector de la inteligencia artificial, buscando desarrollar la industria de la alta tecnología. Según la Federación Internacional de Robótica, China es el país del mundo que más utiliza robots industriales; se calcula que existen cerca de 340 mil repartidos en las fábricas.
El mercado chino de robots de servicios dejó una ganancia de mil 320 millones de dólares en 2017, y se estima que para el 2022, la derrama llegue a cuatro mil 900 millones de dólares.
En una conferencia internacional sobre robótica en Pekín, se habló de robots cirujanos e, incluso, de algunos capaces de jugar a bádminton o tocar la batería. No obstante, ya existen androides muy realistas que pueden conversar, activar aparatos eléctricos, tener expresiones faciales complejas y hasta sostener relaciones sexuales.
[Te puede interesar: Así es como la contaminación puede afectar tu cerebro]
¡Denuncia en Uno!
¿Conoces o tienes fotos y videos de algún acto de posible negligencia, corrupción y abuso de autoridad? Mándalo al WhatsApp de Uno TV: 5562115131. ¡Compártelo! Nosotros le damos seguimiento.