El tamaño y la ternura que caracteriza a los minipig son factores que les dieron popularidad entre la población que desea tener una mascota; sin embargo, el investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Itzcóatl Maldonado Reséndiz, advierte sobre las complicaciones que pueden tener.
De acuerdo con el académico de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, estos animales pueden alcanzar un peso de hasta 70 kilos, lo que los convierte en mascotas poco manejables para espacios pequeños.
Además, dijo, son fáciles de contraer infecciones parasitarias al momento de convivir con otros animales en jardines comunitarios.
- En ese sentido, Maldonado Reséndiz recomienda que no se tengan en apartamentos pequeños o acompañados de niños, pues a los cerdos no gustan, completamente, del contacto con la gente; gritan todo el tiempo e incluso muerden y las piezas dentales pueden lastimar severamente a una persona.
Incluso las razas más pequeñas, como los minipig o los vietnamitas, pueden llegar a tornarse agresivos, más aún cuando de un macho se trata, pues son temperamentales.
Alertó que debido a la demanda comienzan a desarrollar especies que puedan ser cada vez más pequeñas para que puedan permanecer al interior de los hogares, situación que afecta el desarrollo de los animales.
Alimentación
Alimentarlos tampoco es tarea sencilla como pudiera pensarse, pues, a diferencia de un perro o un gato, para los cuales existe gran variedad de alimentos destinados para su desarrollo, en el caso de los cerdos no pasa lo mismo.
Por lo anterior, los dueños comienzan a alimentarlos a base energética, que, en combinación con la actividad física limitada, genera que engorden mucho, de modo que a los cinco o seis años de edad ya están muy pesados y empiezan a tener problemas articulares.