Alrededor de 400 regiones del planeta se encuentra en situación de escasez de agua o estrés hídrico extremo, de acuerdo con un estudio realizado por el World Resources Institute (WRI).
El estrés hídrico se produce cuando la demanda de agua potable es más alta que la cantidad disponible; también puede darse porque la calidad es tan baja que su uso no es apto para el consumo humano.
Casi un tercio de la población global padece esta situación; sin embargo, los países de Medio Oriente son considerados los de mayor estrés hídrico y actualmente enfrentan problemas que afectan aspectos económicos y sanitarios.
¿Qué pasará con México?
Según la investigación, México podría enfrentar una situación complicada a corto plazo sino se toman medidas, ya que 15 de los 32 estados del país están clasificados en situación de estrés hídrico.
La Ciudad de México es la que más está en peligro debido a que tiene un sistema de agua muy frágil. Sus redes de agua tienen pérdidas cercanas al 40%, por lo que es urgente recargar, utilizar mejor los acuíferos, y pensar en una fuente externa de abastecimiento para evitar la escasez.
Problemas a futuro
Expertos advierten que la escasez de agua podría causar el desplazamiento de millones de personas en el mundo, así como generar inestabilidad política. También revelaron que existen países sin estrés hídrico grave, pero que también se encuentran vulnerables debido a las sequias.
Países que han resuelto este conflicto
Existen lugares en los cuales las condiciones socioeconómicas son las principales impulsoras del estrés hídrico.
Por ejemplo, en Singapur construyeron un sistema de abastecimiento sustentable; mientras que en Israel usaron tecnologías avanzadas para mejorar el recurso del agua.
Lo que suceda depende mucho de la respuesta del país. Y hay ejemplos de países que enfrentan crisis hídricas con éxito".Rutger Hofste, investigador