Las medidas de confinamiento en contra de la pandemia de COVID-19 provocarían 7 millones de embarazos no planeados si este se llega a extender o a durar seis meses, según un estudio del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
Asimismo, por cada tres meses que se mantenga el confinamiento habrá hasta dos millones más de mujeres que no puedan utilizar anticonceptivos modernos, señaló el organismo de las Naciones Unidas especializado en la salud sexual y reproductiva.
Reveló también que se prevén 31 millones de casos más de violencia por razón de género, si el confinamiento se prolonga al menos durante seis meses. Además, se espera que, por cada tres, haya 15 millones de casos adicionales de agresiones a mujeres.
Durante el próximo decenio también podrían producirse dos millones de casos de mutilación genital femenina evitables a causa de la interrupción de los programas de prevención en respuesta al COVID-19.
La pandemia agrava las desigualdades, y las mujeres y niñas que ahora corren el riesgo de perder su capacidad para planificar sus familias y proteger sus cuerpos y su salud se suman por millones", aseguró la directora ejecutiva del UNFPA, Natalia Kanem.
Finalmente, mencionó que el estudio tuvo como objetivo revelar la enorme magnitud de la repercusión que el COVID-19 tiene en las mujeres a medida que los sistemas de salud se ven desbordados, se cierran establecimientos sanitarios o se limitan los servicios que ofrecen a mujeres y niñas.
Más efectos de la pandemia sobre la seguridad de las mujeres
Además de los efectos psicológicos, económicos y hasta sociales que tendrá la pandemia del COVID-19, el progreso en la lucha de los derechos de las mujeres y su bienestar se verá afectado de la siguiente manera, según la Organización de las Naciones Unidas.
- Es probable que la pandemia de COVID-19 cause una reducción de un tercio en el progreso hacia el fin de la violencia de género para 2030
- Por cada 3 meses que continúe el confinamiento, habrá 15 millones adicionales de casos adicionales de violencia de género
- La reducción en el uso de anticonceptivos podría tener graves consecuencias, pues si las interrupciones del coronavirus continúan por un año, podría haber hasta 15 millones de embarazados no deseados.