Un equipo de astrónomos del Observatorio Europeo Austral (ESO) y otros institutos descubrieron al "nuevo vecino" del planeta Tierra, un agujero negro que se encuentra a sólo mil años luz de la Tierra.
De acuerdo con los expertos este hoyo negro es el más cercano al Sistema Solar que cualquier otro encontrado hasta la fecha y forma parte de un sistema triple que se puede ver a simple vista.
El equipo originalmente observó el sistema, llamado HR 6819, como parte de un estudio de sistemas de doble estrella . Sin embargo, al analizar sus observaciones, se sorprendieron cuando encontraron un tercer cuerpo, no visto antes: un agujero negro .
Usando el telescopio MPG / ESO de 2.2 metros en el Observatorio La Silla de ESO en Chile, los expertos pudieron saber que se trataba de un agujero negro sobrante de la muerte de una joven estrella fugaz, que tiene como cuatro o cinco veces la masa del sol y como 40 kilómetros de diámetro aproximadamente.
"Washington, DC encajaría fácilmente en el agujero negro, y una vez que entrara, nunca volvería", dijo el astrónomo Dietrich Baade, coautor del estudio.
Debido a que los agujeros negros pasan desapercibidos en el espacio, los científicos sólo pueden detectarlos cuando engullen secciones de una estrella compañera o algo más que cae en ellas.
No obstante, el equipo logró el hallazgo al rastrear las dos estrellas que bailan a su alrededor y a una más con órbita deformada que se encuentra a su interior siendo devorada.
Gracias a esto, los astrónomos lograron determinar que este hoyo es uno de los primeros agujeros negros de masa estelar encontrados, que no interactúan violentamente con su entorno, y que sus dos estrellas compañeras no están lo suficientemente cerca como para ser absorbidas.
- El agujero negro más cercano a la Tierra anterior a éste, está probablemente a unos 3 mil 200 años luz.
Agujeros negros, los vecinos callados de la Tierra
Los astrónomos han visto sólo un par de docenas de agujeros negros en la Vía Láctea hasta la fecha, casi todos interactuando fuertemente con su entorno y dan a conocer su presencia al liberar rayos X potentes en esta interacción .
No obstante, los científicos estiman que, durante la vida de la galaxia, muchas más estrellas colapsaron en agujeros negros cuando terminaron sus vidas, por ello creen que este descubrimiento podría ser la punta del iceberg, ya que proporciona pistas sobre dónde podrían estar los muchos agujeros negros ocultos en la Vía Láctea, impulsando su estudio en el futuro.
Debe haber cientos de millones de agujeros negros por ahí, pero sabemos de muy pocos. Saber qué buscar debería ponernos en una mejor posición para encontrarlos". Thomas Rivinius, científico de ESO y director del estudio.
El estudio de este importante descubrimiento fue publicado el miércoles en la revista Astronomy & Astrophysics.