Los niños migrantes mexicanos que esperan junto con sus familias en los campamentos de la zona fronteriza de México con la intención de solicitar asilo a los Estados Unidos han comenzado a enfrentarse a temperaturas congelantes debido a las recientes condiciones climatológicas en el norte del país.
- En Ciudad Juárez simplemente hay cerca de 200 menores que tiemblan de frío en tiendas de campaña en la frontera con Estados Unidos.
Las autoridades mexicanas han intentado trasladar un campamento de solicitante de asilo migrantes en una región donde en los últimos meses se ha visto un rápido aumento en los mexicanos que buscan solicitar el asilo, situación que causa un retraso en la ciudad debido a que los funcionarios fronterizos de los Estados Unidos limitan la cantidad de casos de asilo que reciben en el puerto de entrada cada día.
Una lista de espera tiene registradas a alrededor de mil 200 personas de las cuales aproximadamente 550 se quedan en campamentos cerca del puente hacia Estados Unidos, comentó el gobierno del estado de Chihuahua.
- Casi la mitad de los que están en los campamentos son niños menores de 12 años.
De acuerdo a lo que predicen los pronósticos del tiempo se avecinan temperaturas congelantes en el área de Ciudad Juárez-El Paso durante el fin de semana.
Si traemos realmente ganas para entrar a Estados Unidos porque realmente está muy dura la delincuencia donde estamos viviendo, está feo. Preferimos aguantar este frío que regresar a lo feo que está en nuestro rancho, comentó un migrante de Michoacán.
Venimos de Guerrero y pues ahorita ya estamos decidiendo pasarnos a retirar porque la verdad ya el frío está muy feo. Traemos niños que ya se nos están enfermando y estamos decepcionados porque ya no podemos pasar, al parecer ya está lleno (allá adentro) y ya no nos dejan pasar, añadió otro migrante de Guerrero.
Los migrantes viven meses en la frontera de México
Las políticas de la administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, están destinadas a reducir el número de recién llegados al país que él gobierna. Esto ha llevado a que decenas de miles de solicitantes de asilo, principalmente centroamericanos, vivan durante meses en la frontera de México mientras esperan por citas en los tribunales estadounidenses o entrevistas con funcionarios fronterizos.