Los maestros que esta semana han dejado sin clases a los niños en los estados de Chiapas, Guerrero, Michoacán y Oaxaca "son una minoría que no defiende los legítimos derechos y aspiraciones del magisterio", señaló la Secretaría de Educación Pública (SEP).
En un comunicado, la dependencia federal indicó que líderes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) han mantenido una "actitud beligerante" y contraria al propósito de que los niños mexicanos tengan una enseñanza de calidad.
La SEP también mencionó que con estos actos lastiman gravemente la confianza depositada en ellos por los padres de familia.
"Lo que esos líderes defienden es, más bien, regresar al sistema de privilegios ilegales, indebidos e injustos, del que se beneficiaron por largo tiempo, cuando la venta de plazas, la manipulación del escalafón o la extorsión para ubicarte en una escuela u otra era lo normal", criticó.
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