La Clínica de Derechos Humanos de la Facultad de Derecho de la Universidad de Texas, en colaboración con el Centro Diocesano para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios de Coahuila, México, realizó un informe basado en el análisis de las declaraciones de testigos en tres juicios federales en Estados Unidos llamado: Control&Sobre Todo el Estado de Coahuila".
Entre el 2013 y el 2016, integrantes del cártel de Los Zetas fueron juzgados en tribunales en Austin, San Antonio y Del Rio, Texas por asesinato, conspiración para importar drogas y armas y lavado de dinero. Estos juicios dieron a conocer nueva información y corroboraron información que ya había sido documentada sobre las operaciones de Los Zetas y abusos a derechos humanos cometidos por el cártel.
Derivado de lo anterior, el informe señala que el cártel de Los Zetas es una organización jerárquica similar a un grupo paramilitar en su origen y su estructura.
El texto menciona que el cártel fue fundado originalmente por 31ex miembros de las fuerzas especiales del Ejército mexicano y de Guatemala a finales de los 90, y agrega que la mayoría de los integrantes originales han muerto o están en prisión. Sin embargo, a lo largo de los años, muchos más se han unido al cártel, ya sea de manera voluntaria o por la fuerza.
Según el documento, basado en las declaraciones de los testigos, sugiere que la estructura de Los Zetas gira en torno a diferentes ciudades o plazas, como se refieren a ellas los mismos narcotraficantes.
Una plaza es como una ciudad, y ellos ponen a una persona a cargo para que controle la ciudad& Los jefes de plaza son más como para seguridad del cártel, [para] asegurarse que nadie moleste a las personas que venden la droga. Testimonio
Territorio presuntamente controlado
Según información del documento Control& Sobre Todo el Estado de Coahuila, diversos testigos en los tres procesos declararon sobre el control de Los Zetas en varios estados.
Rodrigo Humberto Uribe Tapia, asesor de inversiones y encargado de lavado de dinero, mencionó que los estados de Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas, Veracruz, Zacatecas, San Luis Potosí, y Puebla estaban bajo un control total de Los Zetas y los estados de Morelos (y su capital, Cuernavaca) y Tamaulipas (en particular la ciudad de Tampico) estaban bajo la influencia de Los Zetas, más no bajo un control total.
Asimismo, Mario Alfonso Cuellar, alias Poncho Cuellar, narcotraficante para Los Zetas detenido en 2011, dijo, sin mencionar muchos detalles, que Los Zetas controlaron más de 26 o 27 estados en México.
Según las declaraciones de Cuellar, este control se manifestó de diferentes maneras, incluyendo violencia extraordinaria y corrupción. El texto señala que en su mayoría, cuando los testigos hicieron referencia a este control, explicaron cómo el cártel ejerció su influencia sobre las fuerzas policiales, fiscalías y demás funcionarios públicos, para evitar que interfirieran con sus operaciones y para sembrar el terror en el área, aunque la mayoría de las veces no fueron muy específicos.
El documento también se incluye la explicación del jefe de plaza de Zacatecas, Iván Velásquez Caballero, da a entender el control generalizado que tienen sobre un lugar en específico:
-Sr. Gardner (Fiscal de los EE. UU.): Y como cabeza de Zacatecas, ¿cuáles eran sus responsabilidades en el cártel de Los Zetas?
- Caballero: Empezar a organizar, tener todo organizado, las ciudades, operaciones, la policía, todo lo que tenga que ver con la organización. Entonces, seguridad, policía, operaciones, y organizar la compra de marihuana. Comprar la marihuana y hacer que llegue a Coahuila.
Finalmente, Cuellar definió bien esta concepción del control de Los Zetas sobre las plazas:
Una plaza es una ciudad, algo como Piedras Negras, donde ejerces tu control sobre la policía municipal, sobre la policía federal, y las otras agencias policiales, donde pagas una cuota mensual para que puedas hacer cualquier negocio de drogas o cualquier otro delito que quieras cometer.
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