Las pruebas rápidas para detectar el nuevo coronavirus en México no son recomendación de la Secretaría de Salud, así lo puntualizó Hugo López-Gatell.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, dijo que la Cofepris autorizó, con ciertos límites, algunas pruebas rápidas, pero de ninguna manera se debe interpretarse como una recomendación de la Secretaría para utilizarlas.
Recordó que el aval lo dio la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para el uso de siete de estas pruebas en el país
Aseguró que las pruebas rápidas no representan un instrumento de diagnóstico útil sobre COVID, dado que "tienen muy baja sensibilidad y especificidad, que son los dos atributos fundamentales de las pruebas diagnósticas, para poder distinguir quienes realmente tuvieron o nunca tuvieron exposición al virus", añadió el funcionario de Salud.
Solicitó no confundir la autorización sanitaria de estas pruebas como una recomendación de la Secretaría de Salud de utilizarlas, porque no hay recomendación en ese sentido.
Pruebas para COVID-19
Hoy en día existen pruebas para detectar si una persona está o ha estado infectada de COVID-19: La PCR, la más fiable, que detecta y cuantifica el virus; así como las llamadas pruebas serológicas o de inmunidad al COVID-19 que detectan si una persona padeció la enfermedad.
¿Qué es la prueba PCR?
Las PCR (siglas en inglés de "Reacción en Cadena de la Polimersa"), son pruebas de diagnóstico que se llevan utilizando durante años en diferentes crisis de salud pública relacionadas con enfermedades infecciosas. Las PCR sirven para comprobar si una persona está infectada o no con COVID-19
¿Qué es la prueba de inmunidad al COVID-19?
La prueba de inmunidad al COVID-19 trabaja con los llamados antígenos (proteínas) del virus SARS-CoV-2, que muestra la respuesta inmunológica contra el patógeno.
La prueba serológica se aplica sobre una gota de sangre del paciente y detecta los anticuerpos que produce el organismo mientras está respondiendo o ha respondido en algún momento a la infección.
Estos anticuerpos son los IgM (inmunoglobulina M) y los IgG (inmunoglobulina G), que se adhieren al virus para desactivarlo o eliminarlo.
El organismo de las personas puede tardar al menos más de una semana en liberar los anticuerpos IgM y los IgG, que luego pueden quedarse por dos o tres meses en el cuerpo antes de que sean indetectables, aunque el virus ya se haya ido.
Por lo tanto estas pruebas, al resultar positivas, suelen detectar anticuerpos de infecciones pasadas o recientes.
- ¿Para qué sirven las pruebas de inmunidad al COVID-19?
Las encuestas serológicas sirven para identificar qué porcentaje de la población desarrolló anticuerpos ante un virus; es decir, si crearon inmunidad.
Pero el subsecretario de Salud, Hugo López-Gattel ha expuesto que una de las limitaciones actuales que enfrenta el mundo es que no existe una evidencia científica sólida sobre la eficiencia de los anticuerpos desarrollados a partir del nuevo coronavirus.
"No hay evidencia de que cuándo empiezan a aumentar los anticuerpos desde el día de la infección, de cuánto duran y si la concentración significa protección biológica o inmunidad", explicó el subseretario.
De acuerdo con López-Gatell, para crear una "barrera" ante al nuevo coronavirus, "necesitamos llegar a 70% de inmunidad poblacional".