El desierto del norte de México parecía perfecto para los menonitas cuando llegaron hace 26 años: un lugar donde no había luz eléctrica, televisión ni automóviles. Pero paulatinamente, la modernidad llegó con la electricidad a desafiar a esta comunidad profundamente tradicional.
Tras largos caminos de tierra entre montañas, cerros y pastizales de Chihuahua, a unos 230 kilómetros de Ciudad Juárez, aparece Sabinal, una comunidad de 10 mil hectáreas habitada por unos mil 500 menonitas de piel blanca, cabello rubio y ojos claros.
- Los orígenes menonitas provienen de Alemania y Holanda, pero a través de los siglos han migrado a lugares como Rusia, Canadá, México y Centroamérica.
Dedicada a la agricultura, la fabricación de queso y la ganadería, esta comunidad religiosa se dividió entre los que quieren quedarse en Sabinal y los que quieren amarrar los caballos a sus carretas, cargar sus pertenencias y mudarse a otro lugar aún más aislado.
La llegada de los Menonitas a Chihuahua
Su historia en Sabinal data desde 1992, cuando, guiados por sus líderes religiosos, llegaron a Chihuahua provenientes de Zacatecas, donde ya no había tierra suficiente para permitir abastecer a toda la comunidad menonita.
¿A qué se dedican?
- La mayoría de los varones hablan un poco de español y se dedican a la agricultura de algodón, chile, sorgo, calabaza y cebolla.
- Las mujeres hablan bajo alemán, que es un conjunto de variedades lingüísticas germánicas. Se encargan de la casa y el cuidado de sus hijos.
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