El cardenal Norberto Rivera Carrera afirmó que la Iglesia no odia ni condena a nadie, al reiterar su enérgico rechazo a la masacre en Orlando, Florida, el pasado fin de semana, la cual calificó como crimen de odio.
"No debemos olvidar que todos somos hijos de Dios que tenemos una dignidad única; la Iglesia no odia a nadie, la Iglesia tiene innumerables enemigos, pero ella no se puede permitir odiar a nadie".
Norberto Rivera recordó que el pasado domingo la Iglesia católica emitió un comunicado en el que condenó los hechos en un bar gay de Orlando, donde 49 personas perdieron la vida.
Apuntó que la violencia, el odio o la discriminación no tienen cabida en la Iglesia, "y quien lo ejerce está en contradicción con el evangelio de Jesús, quien nos pide amar a todos, incluso a nuestros enemigos".
"Exhortamos a que se respete a quienes piensan diferente, pero pedimos que también se nos respete, y caminemos juntos en la construcción de una sociedad fraterna y tolerante".