Hay quienes llegaron a cuestionar o dudar acerca de la veracidad del nuevo coronavirus (COVID-19). Sin embargo, como reza el refrán, "nadie experimenta en cabeza ajena": muchos de los incrédulos "abrieron los ojos" cuando algún miembro de su familia pasó a formar parte de las cifras de contagios por COVID-19.
Éste es el caso de la familia del pequeño Omar. En entrevista con Uno TV, los papás de este bebé contaron su experiencia: combatieron la enfermedad de la mano de su hijo recién nacido, quien fue diagnosticado con COVID-19 cuando tenía tan solo un mes y medio de edad. Luego del diagnóstico, fue ingresado de urgencia al hospital porque tenía problemas para respirar.
Estoy totalmente impresionada, qué valor tuvo, qué fuerza tuvo él para haber aguantado inyecciones, tantos aparatos, que estuvo casi a punto de morir y yo no sé qué tanta fuerza agarró. Es un orgullo para mí decir: es mi hijo y él pudo superar el coronavirus", dijo la mamá de Omar.
Dos semanas después, y gracias al trabajo del personal médico, Omar fue dado de alta tras vencer al nuevo coronavirus.
Incredulidad sobre el COVID-19, uno de sus peores enemigos
La familia, desde casa, relata cómo cree que el bebé se contagió, pues reconoce que la incredulidad y el escepticismo fueron sus peores enemigos.
En medio de la pandemia de COVID-19, la familia asitió, con Omar en brazos, a una fiesta.
El bebé tenía días de haber nacido; esto fue el 9 de abril, el día de la reunión, y decidimos ir a la fiesta, fue el viernes; para el lunes, el bebé comenzaba a ponerse un poquito mal, yo lo escuchaba como que no podía respirar bien". Mamá de Omar
Ahora, sus padres comparten su testimonio para que la gente haga conciencia sobre las consecuencias de no tomar en serio la pandemia del nuevo coronavirus.