Blanca Juárez es enfermera; desde hace tres años labora en el hospital San Pedro Xalpa, en Azcapotzalco, Ciudad de México, actualmente convertido en un hospital COVID-19.
Conforme pasan los días, toma mayores medidas de seguridad sanitaria para realizar su labor durante, al menos, ocho horas continuas.
Sabe que no debe ni puede contagiarse:
Ya puesto el traje, estando adentro, sudamos, no vamos al baño, no comemos, no tomamos agua durante la jornada de trabajo&Yo sé que tal vez en algún momento puedo ser portadora asintomática, pero realmente es una experiencia un poco difícil porque tenemos a alguien que nos espera en casa", apunta.
Pese al miedo, su familia la alienta en este inicio de la fase más complicada de la pandemia por coronavirus (COVID-19) en México.
Ellos me motivan a seguir adelante, que estén conmigo. Me dicen: 'Hija, échale muchas ganas, no te preocupes, no va a pasar nada. Cuídate mucho, aquí te esperamos; échale muchas ganas'"