Ante el fenómeno de hospitales abandonados, algunos con al menos 12 años en el abandono en casi toda la República mexicana, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramirez, informó que el Gobierno federal inyectará recursos para sacar esos proyectos adelante, pero advirtió que se investigará a los responsables.
Tenemos un problema de deudas, para el sector público, quebrantos, incluso patrimoniales que han sido sujeto de un cuidadoso análisis en algunos casos ya se están deslindando responsabilidades administrativas como corresponde con la ley", dijo Hugo López-Gatell Ramirez.
En esta tercera entrega que retrata las consecuencias de la corrupción y el desvío de recursos por algunas administraciones estatales, las autoridades de Salud informaron que para el año 2020 se destinarán 2 mil 813 millones de pesos, monto que contempla la construcción, equipamiento y personal para dichos hospitales abandonados.
Además, como parte del plan, el Gobierno federal inició una serie de convenios con los gobiernos estatales en los que se encuentran esos hospitales abandonados e inconclusos, para llegar a buenos términos.
Por ejemplo, el secretario de Salud del estado de Coahuila, Roberto Bernal, dijo que ya se rescindieron los contratos con los constructores anteriores y que tenemos una nueva empresa que está trabajando muy rápido.
Algunos hospitales abandonados se sumarán al nuevo Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), el cual, con un presupuesto propio de 80 mil millones de pesos, también asumirá el control de las unidades médicas estatales, así como de aquellas que formaban parte del extinto Seguro Popular.
Y obviamente el siguiente reto es asegurar que existan los recursos financieros y los recursos humanos para que operen [&] ése es un reto general de todo el país", agregó López-Gatell Ramirez.
La recuperación de esas construcciones permitirá que fluya más rápido y con mejor calidad la atención médica, en especial a la gente de escasos recursos o que no tienen seguridad social, pues tendrán acceso a los servicios de salud de nivel primaria y a los de alta especialidad, de acuerdo con Jorge Salas Hernández, director del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER).
Con esto, podrían terminarse los pretextos administrativos, de los gobiernos estatales, para culminar proyectos.
Por ahora, la reactivación de obras anunciadas ya genera expectativas, mientras que el Gobierno federal aún analiza qué obras sí podrían ser rescatadas y cuáles no.