Ante el uso de la dexametasona en países europeos, en donde es empleado en pacientes graves, hospitalizados por COVID-19, especialistas alertan que ese desinflamatorio no previene los contagios del nuevo coronavirus. Y alertaron que su mal uso podría tener consecuencias fatales.
La endocrinóloga Adriana Balderrama alerta que si la dexametasona se utiliza sin supervisión médica, puede provocar problemas en el organismo.
"Uno de los efectos adversos, el más frecuente, es la elevación de la glucosa, también puede haber elevación de la presión arterial, también se ha visto incremento del riesgo de hemorragia gastrointestinal cuando se da dosis alta". Adriana Balderrama, especialista en endocrinología.
Además, explica que el uso prolongado de dexametasona genera efectos secundarios en los pacientes.
"Descontrol de los lípidos y, si lo toma uno mucho tiempo, se pueden descalcificar los huesos; nos da una serie de consecuencias". Adriana Balderrama, especialista en endocrinología.
La especialista señala que las complicaciones por el uso de dexametasona también pueden darse si se suspende bruscamente.
"Eso también es grave porque lo que les causa baja la presión, ahora les baja la glucosa, se pueden desmayar, se pueden tener alteraciones de sodio, en su potasio". Adriana Balderrama, especialista en endocrinología.
Recuerdan que los buenos resultados de la dexametasona se deben a que se usa en el paciente grave correcto, en el momento correcto, por el equipo médico correcto y en el hospital idóneo.
"Este fármaco demostró una reducción significativa de la mortalidad en los pacientes intubados o en los pacientes que requirieron tratamiento con oxígeno suplementario, pero no demostró ninguna reducción significativa de la mortalidad de los pacientes que no requerían intubación u oxígeno suplementario, en todo el resto de las personas no hubo diferencia entre darlo y no darlo". Adriana Balderrama especialista en endocrinología.
Por ello, pidieron a la población no utilizarlo sin supervisión médica y no acudir a farmacias para adquirirlo.
"No hay que cometer el mismo error que cometimos con otros medicamentos, como la cloroquina, o como algunos otros, en los cuales existe un pánico con la población y corrimos a la farmacia a buscar el medicamento y se agotó, porque eso genera más conflicto y pudiesen tener consecuencias". Azael Vidal, especialista en urgencias.